ACV: claves para detectarlo a tiempo y disminuir secuelas

Es la primera causa  de  discapacidad y la  segunda de muerte en el mundo. Te contamos por qué la sigla HaBraSo podría salvarte la vida.

ACV: claves para detectarlo a tiempo y disminuir secuelas
Accidente cerebrovascular

Cada 29 de octubre el mundo conmemora el Día Mundial del Accidente Cerebrovascular (ACV) o Ictus con el fin de informar y generar conciencia sobre esta patología que se tiene un episodio cada cuatro minutos en el país.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el Accidente Cerebrovascular (ACV) representa la segunda causa de muerte y la primera de discapacidad en adultos, a nivel mundial. Afecta a 15 millones de personas por año, de las cuales cinco millones mueren y un 30% queda con una discapacidad permanente.

En la Argentina, se estima que una persona sufre un ACV cada cuatro minutos y que mueren alrededor de 20 mil personas por año. El 18% de los casos vuelve a padecer un nuevo ACV después del primer año.

Según datos de la Fundación Favaloro, en nuestro país se producen anualmente más de 100.000 ACV, de los cuales, muchos dejan graves secuelas y aproximadamente en un tercio de ellos el desenlace es fatal.

¿Qué es un ACV?

"Un accidente cerebrovascular puede manifestarse de dos formas: por la pérdida súbita del flujo sanguíneo cerebral o bien por el sangrado dentro de la cabeza", explica Máximo Zimerman, jefe de la Clínica de ACV y de la Clínica de Neurorehabilitación de INECO, y advierte: "Una cosa es segura: nada es igual en la vida de un paciente después de que lo experimenta".

Por eso, el especialista hace hincapié en la detección temprana y la pronta atención médica a fin de "reducir considerablemente las posibilidades de muerte y discapacidad".​

¿A qué síntomas hay que estar alerta?

Desde INECO, Zimerman explica que existen tres signos principales del ACV y que pueden detectarse en el cuerpo a simple vista. En esta línea, hace una propuesta casi lúdica para tener en cuenta la sigla HaBraSo, que implica prestar atención al habla, a los brazos y a la sonrisa. "Si el paciente habla con dificultad, pronuncia frases incompletas o le cuesta articular su discurso, podría tratarse de un síntoma de ACV", explica el especialista. Además, pide prestar atención a "si la persona levanta ambos brazos hacia adelante y uno de ellos cae; o bien, si sonríe de forma asimétrica –es decir, si las dos mitades de su sonrisa se perciben 'desparejas'- existe la posibilidad de que el paciente corra riesgos de padecer un ACV".

Día Mundial del ACV: síntomas a tener en cuenta
Día Mundial del ACV: síntomas a tener en cuenta

El Dr. Claudio Waisburg, Director Medico del Instituto SOMA, destaca los siguientes síntomas cerebrovasculares: la pérdida de fuerza repentina en un lado del cuerpo, especialmente en la cara, en un brazo o una pierna; sensación de hormigueo en una mitad del cuerpopérdida repentina de visión parcial o totaldolor de cabeza de una intensidad poco habitual y sin causa aparente; vértigo, mareos y desequilibrios; y la ya mencionada dificultad de expresión y alteración repentina del habla.

Factores de riesgo

Zimerman menciona los diez factores de riesgo que provocan el 91% de todos los ACV en el mundo: la hipertensión, el sedentarismo, una situación desfavorable de lípidos en la sangre, una dieta pobre, el incremento de las medidas o de la proporción cintura-cadera, factores psicosociales, tabaquismo, una alta ingesta de alcohol, enfermedad cardíaca y diabetes.​

En esta línea, el Dr. Waisburg explica que son los mismos hábitos saludables los que protegen al cerebro y al corazón. Y alienta a llevar un "control de la tensión arterial y el pulso, especialmente en la población de mayor edad". Además, asegura: "Las posibilidades de recuperarnos con éxito aumentan cuanto antes seamos atendidos, por lo que ante las primeras sospechas debemos ponernos en contacto con un número de emergencia o una guardia médica".

En Argentina una persona sufre un ACV cada cuatro minutos y que mueren alrededor de 20 mil personas por año. El 18% de los casos vuelve a padecer un nuevo ACV después del primer año.
En Argentina una persona sufre un ACV cada cuatro minutos y que mueren alrededor de 20 mil personas por año. El 18% de los casos vuelve a padecer un nuevo ACV después del primer año.

Recuperación

"Un paciente con secuelas de ACV puede mejorar inclusive años después del evento con un programa especializado de rehabilitación", asegura Zimerman, y cuenta que "la ciencia detrás de la neurorehabilitación es la neuroplasticidad", y describe la facultad del sistema nervioso de cambiar su estructura y funcionamiento como reacción a las diversas situaciones y entrenamiento. "Este potencial adaptativo permite al cerebro reponerse de lesiones adquiridas, como el caso del ACV, disminuyendo la intensidad y número de secuelas", concluye el especialista.