Otro sector en crisis: cañeros de Jujuy y Salta se declararon en “estado en alerta”

La sequía y la crisis económica ponen en jaque al segmento de los productores independientes. Por Martín Llanos*

Tierra seca y cañaverales de escasa altura,  señales claras del impacto de la sequía en los campos de Jujuy.
Tierra seca y cañaverales de escasa altura, señales claras del impacto de la sequía en los campos de Jujuy. Foto: Vía Jujuy

Los productores cañeros de Jujuy y Salta declararon al sector “en estado de alerta” por el “fuerte impacto” de la sequía que “atenta contra el futuro de la actividad”, panorama por el que la próxima semana se reunirían en la sede la Unión Cañeros Independientes de Jujuy y Salta, en San Pedro de Jujuy, para analizar la difícil situación y las acciones a seguir para afrontar esta adversidad que, aseguran, los está llevando al quebranto.

“Luego de atravesar tres campañas bajo los efectos devastadores de la sequía ocasionada por la permanencia del fenómeno climático ‘La Niña’, el sector cañero ha quedado en una situación caótica, sin agua para riego, sin financiamiento, y con un costo altísimo de electricidad que supera los beneficios de utilizarla”, advierten desde el sector.

Los surcos evidencian la falta de agua y el grave estado de los cañaverales. La Unión Cañeros Independientes de Jujuy y Salta calcula que las pérdidas serán superiores al 50% este año.
Los surcos evidencian la falta de agua y el grave estado de los cañaverales. La Unión Cañeros Independientes de Jujuy y Salta calcula que las pérdidas serán superiores al 50% este año. Foto: Vía Jujuy

Asimismo alertan sobre “los efectos fueron acumulativos durante las campañas 20/21 - 21/22 y la actual 22/23, ya que comenzamos con pérdidas significativas en los rendimientos culturales, pasando luego a la pérdida de cepa, plantaciones malogradas y hoy nos encontramos con que un gran porcentaje de cañaverales no llegará a cosecha”.

En la provincia de Jujuy el sector cañero independiente cultiva alrededor de 16.000 hectáreas, de las cuales se debería renovar este año el 20%, es decir unas 3.200 hectáreas aproximadamente, para sostener la producción.

50% DE PÉRDIDAS EN LA PRODUCCIÓN

Cabe recordar que la situación y las consecuencias de la prolongada sequía vienen siendo motivo de alertas por parte del sector a los Gobiernos de ambas provincias desde principios del año pasado.

Prueba del impacto de este cuadro es que la zafra pasada finalizó un mes antes con pérdidas en la producción que ascendieron a más del 30%, mientras que para la zafra de este año -pronta a iniciar en el mes de mayo- ya se prevé que las pérdidas superen el 50% debido al grave estado de los cañaverales.

También hicieron saber a los Gobiernos sobre las necesidades inmediatas y a largo plazo para atender esta situación, requiriendo la implementación de las medidas necesarias para auxiliar a los productores sumidos en emergencia y/o desastre agropecuario por los efectos de la sequía.

En este sentido mencionaron medidas como una financiación con periodo de gracia y devolución a largo plazo con tasas subsidiadas para la renovación de los cañaverales; obras hidráulicas para mejorar la captación de agua de riego; subsidio a la energía para productores que usen aguas subterráneas; exención de pago de Ingresos Brutos, Canon de Riego e Impuesto Inmobiliario, y suspensión del Anticipo del Impuesto a las Ganancias; y 100% de subsidio en el pago de los aportes patronales, entre otras.

(*) Periodista jujeño especializado en temas agropecuarios. Miembro del Círculo Argentino de Periodistas Agrarios (CAPA).