Sequías: se proyecta una gran baja de la producción y en el ingreso de dólares por las exportaciones

El fenómeno afecta notoriamente al campo que ya prevé las consecuencias. El Gobierno, preocupado por cómo impactará en la economía.

Tiempos difíciles para el campo por la sequía.
Tiempos difíciles para el campo por la sequía. Foto: Ignacio Blanco

Se encendieron las alarmas tanto en el campo como en el Gobierno por la fuerte sequía que afecta a las zonas productivas del país. Además, preocupa la caída de precios internacionales ante el avance de la cosecha de soja en los Estados Unidos y el temor que hay en el mercado por una posible recesión económica. Este escenario hacer prever una importante baja en la producción y en el ingreso de dólares por las exportaciones.

Este es el tercer año consecutivo que se atraviesa una campaña agrícola con el efecto de La Niña, que genera lluvias por debajo de los promedios anuales. Hubo áreas en las que prácticamente no llovió en los últimos cuatro meses y las previsiones no son las mejores para el último trimestre.

El cultivo de trigo atraviesa una crisis por la falta de agua.
El cultivo de trigo atraviesa una crisis por la falta de agua.

La ausencia de lluvias y los cambios bruscos en las temperaturas suman efectos notorios y se complica la situación para los cultivos de invierno y el maíz. Los técnicos de la Guía Estratégica para el Agro de la Bolsa de Comercio de Rosario (Red Gea) comunicaron que en la región núcleo se perdieron 130.000 hectáreas de trigo: un 10% del área sembrada.

El mismo relevamiento adelantó que de las 1,2 millones de hectáreas sembradas con trigo que deberían cosecharse, un 34% está en mala condición, 46% regular, 18% bueno y 2% muy bueno.

El informe semanal de la Red Gea detalló la situación que atraviesan diferentes distritos que integran la Región Núcleo:

  • En Bigand, la situación del trigo “es muy mala”, con un 20% de pérdida de lotes.
  • En San Gregorio, se perdió el 35% de los trigos.
  • En Facundo Quiroga, se perdió el 20% de la superficie.

En tanto, en el norte de región núcleo la situación mejora gracias a algunos milímetros extras que recibieron en El Trébol. No obstante, cerca de allí, en Carlos Pellegrini, advierten que tiene que llover más de 30 milímetros en octubre.

La semana pasada, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires proyectó una caída de casi el 1% en la producción y de más de un 9% en los ingresos de divisas por las exportaciones. Este jueves, comunicó que ya comenzó la cosecha de trigo en algunos lotes del norte del país, pero que la sequía complica el panorama en el sur y sudeste de la provincia de Buenos Aires.

El norte bonaerense es una de las zonas más afectadas por la falta de lluvias hace casi 150 días. Según la bolsa, el trigo tendrá una cosecha de 17,5 millones de toneladas, casi 5 millones de toneladas menos que en la campaña pasada. Para la cebada se proyecta 5 millones de toneladas para cebada: 400.000 toneladas de merma en comparación con lo que se esperaba al comienza de la campaña.

Qué pasa con la cosecha de maíz

Ante un panorama de incertidumbre por la sequía y el contexto político-económico, la actual campaña de maíz pone el foco en las siembras tardías. Para la Bolsa de Comercio de Rosario, más del 90% se sembraría de esa manera en la región núcleo. Eso significa que el ciclo de maíz 2022/23 tendría la menor siembra temprana de los últimos diez años.

La cosecha de maíz no tiene buenas previsiones.
La cosecha de maíz no tiene buenas previsiones.

Actualmente, hay sembradas en región núcleo 135.000 hectáreas con maíz temprano: un 9% de la superficie total intencionada y en siete días solamente se avanzó un 4%. El avance provino principalmente del norte de región núcleo, gracias al agua adicional con el que cuentan esos perfiles.

El nivel de lluvias registradas fue mucho menor a lo que se necesita para generar una implantación segura. Para los especialistas, la fecha límite de siembra es el 15 de octubre.

“La falta de agua está afectando hasta los establecimientos que cuentan con riego. El agua está muy baja en los pozos y, por la escasa cantidad, tenemos el problema de exceso de sales. Aparte, como es un riego complementario, no puede compensar hoy la enorme falta de agua que tenemos. También está el costo que hoy tiene su uso, ya que utilizan diésel”, explicaron desde la BCR.