Juan Manuel Abal Medina: “Con Llaryora el peronismo cordobés puede volver a ocupar un lugar importante en el PJ nacional”

Así lo manifestó el excolaborador de Néstor Kirchner y exjefe de gabinete de Cristina Kirchner, “El peronismo nacional tiene mucho que aprender del peronismo cordobés”, dijo.

JUAN MANUEL ABAL MEDINA. (Archivo).
JUAN MANUEL ABAL MEDINA. (Archivo).

Excolaborador de Néstor Kirchner entre 2008 y 2009 y también exjefe de gabinete en parte del segundo mandato presidencial de Cristina Kirchner, Juan Manuel Abal Medina conversó con Vía País sobre la irrupción de Martín Llaryora en la escena nacional con definiciones sobre federalismo y la ocurrente frase “pituquitos de Recoleta”. Cree que el peronismo nacional “tiene mucho por aprender del peronismo cordobés”.

Córdoba eligió nuevo gobernador y Martín Llaryora sucederá a Juan Schiaretti. ¿Ve una continuidad o el inicio de una nueva etapa del peronismo cordobés?

- Yo creo que hay un proceso que se está terminando, que es el proceso por el cual el peronismo cordobés se aisló del Partido Nacional, por un conjunto de fenómenos que todos conocemos y que no vale la pena ahora recordar. Fue una decisión que se tomó y que fue exitosa en términos de que consiguieron no solo mantener el gobierno provincial, sino incluso recuperar primero y ahora mantener la Ciudad. Esa experiencia creo que está llegando a un límite.

Llaryora y el peronismo cordobés necesitan volver a ocupar un lugar relevante en el peronismo nacional para también tener protagonismo fuera de la provincia. Los efectos de la gestión que han tenido en la provincia no han tenido repercusión nacional y es lo que pasa un poco con la campaña de Schiaretti. Fuera de Córdoba tiene pocas adhesiones porque construyó una perspectiva muy provincial. Me parece que esta nueva generación, tanto Llaryora, obviamente el reciente electo Passerini, como compañeros más identificados con nosotros como el intendente de Villa María, pueden representar algo muy importante como parte de un peronismo nacional que tiene mucho por aprender del peronismo cordobés.

Abal Medina junto a Néstor Kirchner
Abal Medina junto a Néstor Kirchner Foto: Clarín

¿Qué tiene para aprender el PJ nacional del peronismo cordobés?

- Centralmente dos cosas. En primer lugar, la posibilidad de poder convivir en la diversidad. En el peronismo cordobés trabajan y pelean juntos, como decía, sectores claramente kirchneristas como los intendentes que encabeza nuestro amigo de Villa María, Martín Gill, el movimiento evita y otros, con sectores claramente no kirchneristas como Schiaretti y otros. Una muestra de amplitud interesante que expresa el peronismo cordobés.

Por otro lado, el peronismo cordobés tiene un entendimiento muy profundo del rol de la producción. Me parece que el peronismo nacional, por una serie de razones, no interpreta a los sectores productivos como lo hace el peronismo cordobés. Creo que tienen mucho para enseñarnos. El peronismo nace como una alianza policlasista entre obreros y empresarios nacionales; necesitamos recuperar ese diálogo y esa construcción con los sectores de la producción.

¿Le ve recorrido a Llaryora dentro peronismo nacional?

- Yo creo que sí, no tengo ninguna duda. Yo lo conozco un poco, pero lo conozco más los compañeros del Evita y compañero de Villa María. Ahora está discutiendo una manera de ver la política que es la manera del PRO. No dijo “los porteños” dijo “los pituquitos de Recoleta”. Está tomando un rol nacional que es muy interesante, me parece.

¿Considera que la Liga de los gobernadores peronistas no tiene hoy un liderazgo indiscutido?

- Hay una realidad que es la del AMBA. Llaryora viene haciendo referencia a eso. “Ambacentrismo” lo he definido en algunos escritos académicos. El sistema de medios, por ejemplo, es del AMBA. Si uno se guiaba por ese sistema, Juez arrasaba en Córdoba y lo mismo De Loredo en la Capital.

Yo creo que un liderazgo de los gobernadores tiene que venir necesariamente por fuera del AMBA porque, sino el AMBA se traga al conjunto. Los principales candidatos a presidentes habitan en el AMBA. Habrá que ver cómo queda a fin de año el mapa de las provincias. Llaryora tiene un rol muy importante para jugar. La capacidad de poder ampliar con un liderazgo más generacional expresa una renovación interesante del peronismo.

¿Le sorprendió que la vicegobernadora electa sea radical?

- Me pareció muy inteligente porque justamente Cambiemos o Juntos permanentemente alimentan la grieta. Y la clave de Llaryora en Córdoba es que pudo escapar de esa grieta que se quiere imponer desde el centroporteñismo al resto del país.

A comienzo de la charla aludió al aislamiento del peronismo cordobés respecto del “Partido nacional”. ¿Cuáles fueron esas razones?

- Empezó esto con el conflicto de la 125. Cuando asumió Cristina su segundo mandato intentamos un acuerdo con De la Sota y tuvimos varias reuniones intentando recomponerlo, pero finalmente no se pudo. Fueron varios hechos, no es explicación simple. Cada parte fue tomando un lugar que privó al peronismo nacional de tener al peronismo cordobés con nosotros y al peronismo cordobés le privó de una proyección que necesita para poder tener candidatos nacionales en un proyecto nacional. Ambos sabemos que nos necesitamos mutuamente.

¿Cómo ve a Unión por la Patria para estas elecciones?

- Yo le tengo mucha expectativa a Sergio Massa. Lo más seguro es que la elección se decida en balotaje. Y ahí pesan mucho los candidatos. Cómo se los ve discutiendo, el conocimiento que tienen y me parece que Sergio tiene las cosas buenas de los dos rivales y ninguna de las malas. Tiene el conocimiento y la imagen de gestión de un Horacio Rodríguez Larreta pero con carisma. Y tiene un carisma más como Patricia Bullrich, pero con conocimiento técnico y seriedad.