Marcelo Ciarrochi, un piloto que todo equipo quisiera

Después de su resonante triunfo en San Luis, reafirma sus aspiraciones al título de TC2000. Agradece también a su familia, que lo apoyó desde sus inicios.

Ciarrochi prueba el Citröen del Super TC2000.
Ciarrochi prueba el Citröen del Super TC2000.

Al día siguiente que ganó de punta a punta en San Luis, por la séptima fecha del TC2000, Marcelo Ciarrocchi partió desde Almafuerte, tempranito y como cada lunes, rumbo al Mercado de Abasto.

Del arrasador coche número 25, que el domingo pasado cruzó la bandera a cuadros victorioso en el Autódromo Rosendo Hernández, se subió en algunas horas nomás a otro noble vehículo, el de la empresa familiar de distribución de frutas y verduras, en busca de mercadería.

Tras su segundo y resonante triunfo del año, hubo un asadito de festejo en sus pagos, rodeado de sus afectos; pero enseguida, retomó sus actividades de la semana.

"Mi familia hizo un gran esfuerzo desde mis inicios; y lo sigue haciendo. Una forma de retribuirles es trabajando cada día, y con muchas pilas", le dice a Día a Día.

Las horas, tras su tercera victoria en el TC2000, transcurren también mientras cumple con tareas relacionadas con su equipo, el prestigioso PSG16, cuya sede está en Falda del Carmen.

“Realmente, me siento muy bien trabajando con Javier Ciabattari, Cachi Scarazzini y Walter Bosano –dirigen la escuadra-, junto a su staff de ingenieros y mecánicos, a quienes estoy muy agradecido por todo lo que me brindan, por su confianza; son excelentes profesionales, con quienes sigo aprendiendo cada día en el automovilismo”, confiesa.

Para adelante. "La verdad es que, además de seguir tratando de ser un candidato al título de TC2000, me ilusiono con correr y tener una buena actuación en los 200 Km de Súper TC2000 de Buenos Aires", expresa el almafuertense, que en 2015 participó del evento como piloto del equipo oficial Chevrolet y ahora lo hará alternándose con Esteban Guerrieri en el C4 Lounge del Citroën-Total Team que habitualmente conduce el bonaerense, ganador en Termas.

”Debo esperar que el anuncio se haga oficialmente”, acota Ciarrocchi, con el respeto debido. Pero ya es un hecho.

El PSG16 diseñó, construyó y atiende los autos de la marca de origen francés. Y Ciarrocchi fue el primero en probar el C4 Lounge antes del debut triunfal del coche con Manu Urcera en el Oscar y Juan Gálvez porteño, a principios de este año.

Y se subiría varias veces más durante la temporada, en el marco del “Programa de pilotos apadrinados”, que les permite girar los sábados de prácticas libres de cada fecha.

Para mediados de septiembre, está prevista la continuidad de las pruebas experimentales privadas del PSG16 con los Citroën en el Cabalén. Los 200 Km serán el 1° de octubre.

El arranque. La historia de Chelo Ciarrocchi es la de un talentoso chico que ganaba todo en karting, la gran escuela del automovilismo. Con la licencia de la Federación Regional de Automovilismo Deportivo de la Provincia de Córdoba (FRADC), fue cosechando laureles en el ámbito zonal primero y más adelante en el nacional y el latinoamericano; antes de radicarse en Europa de adolescente, ganó la Copa Mercosur de Karting.

Ya en el Viejo Mundo y en una de las etapas más sacrificadas de su carrera deportiva, vivió en Italia, desde donde partía a correr en distintos países como piloto oficial de la fábrica de karting CRG, recibiendo consejos y siendo acompañado por el prestigioso ingeniero argentino Sergio Rinland.

“De aquella época (justo, la de la crisis argentina de 2001), me quedó sobre todo el haber forjado una valiosísima etapa de formación, no sólo como deportista sino como ser humano”, reconoce.

Y es así; si su disciplina de trabajo, su corrección en los modales y su actitud deportiva en general resaltan entre sus virtudes, mucho tienen que ver aquellos años en los que la remó en Europa.

De haber contado con apoyo económico, muy probablemente hubiese sido un aspirante más a la máxima categoría.

Firme presente. El regreso a Argentina no fue un proceso menor. Pero Ciarrocchi trató de mantenerse entrenado y, cuando tuvo las primeras oportunidades, mostró en los autódromos de nuestro país las condiciones innatas que tenía y también lo aprehendido.

Enseguida, demostró ser un piloto rápido, y ser rápido es fundamental en un deporte en el que gana el que hace una distancia estipulada en el menor tiempo. Pero no se hace a pie sino en auto, y los autos son caros; sobre todo, los buenos.

Así que, si se es rápido y se cuenta con un buen presupuesto, se tiene todo, más allá de las circunstancias que puedan darse. “Yo siempre trato de compensar con trabajo para ser más rápido”, expresa Ciarrocchi, que de la mano del equipo Litoral Group, primero, y del PSG16 desde comienzos de este año, se afirmó como uno de los mejores exponentes del automovilismo nacional.

“No sería posible sin los equipos que me abrieron sus puertas y sin el apoyo de mis propios patrocinadores: Liu Gong, Liftingmach, Ventor, Barale S.A., Brix-3000, Saniobras, Fundarg, CGA Cristales, Iveco y Carlos Gabaglio e Hijos”, agradece.

Ficha personal. Ciarrocchi nació el 23/3/87 en Almafuerte. Dentro del karting, resultó campeón cordobés, argentino y del Mercosur.

En Europa, fue piloto oficial de la fábrica italiana CRG, con un notable podio en un pre Open, dentro de otros destacados resultados.

De regreso a Argentina, llevó adelante una importante campaña en la Fórmula Renault 2.0, incluidos 6 triunfos, antes de debutar en TC2000.

En esta categoría, ya suma 3 victorias (2 en 2017) y pelea por el título. Además, es piloto de pruebas del PSG16 para Citroën en Súper TC2000.