Los trabajadores del Conicet aceptaron la posibilidad de que los becarios afectados por el recorte en los cupos mantengan sus puestos en la estructura del organismo, al menos hasta diciembre de 2017, tal como lo propuso el Gobierno.
De esta forma, el conflicto originado con la toma de la sede del Ministerio de Ciencia y Técnica encontró un principio de solución.
La contrapropuesta de los científicos del Conicet es que quedara afuera del acuerdo la posibilidad de que los becarios que reclamaban su reincorporación se sumaran al plantel de una empresa privada, tal como lo habían ofrecido las autoridades de la cartera de Ciencia y Técnica que encabeza Lino Barañao.
En ese encuentro, que comenzó pasadas las 14.15 en el cuarto piso del edificio de Godoy Cruz al 2200, se acordó un "acta compromiso" de cuatro puntos.
El primer punto del acuerdo establece la prórroga de la beca "a los 343 postulantes a la carrera de investigador científico y técnico" que fueron recomendados y no seleccionados para su ingreso, hasta el 31 de diciembre de 2017.
En segundo lugar, el acta señala que "el Conicet pone a disposición 107 becas extraordinarias" para los postulantes a la carrera de investigador científico y técnico que fueron recomendados y no seleccionados, y que actualmente "no pertenecen al programa de becas del Conicet", también hasta el 31 de diciembre del año próximo.
El tercer compromiso asumido es la creación de "una comisión mixta de seguimiento" del ingreso de los postulantes no seleccionados, que estará integrada por un representante de ATE, uno de cada agrupación de investigadores, y representantes tanto del Conicet como del Ministerio de Ciencia y Técnica.
El último punto del acta es el que establece que, con el acuerdo alcanzado, los manifestantes levantarán la toma.