Cae el petróleo y avanza el coronavirus: se desploman los mercados y anticipan otra jornada negra para Argentina

Londres se encuentra a la cabeza de las bajas generalizadas en las plazas europeas, con un 9,8% de pérdidas.

(AP Photo/Richard Drew)
(AP Photo/Richard Drew)

El histórico desplome de los precios del petróleo y los reinantes temores sobre el impacto del coronavirus en la recesiva economía mundial provocan este lunes otra jornada dramática para los mercados internacionales.

Las plazas europeas registraban pérdidas generalizadas, con Londres a la cabeza, que perdía 9,8%. El resto de las bolsas del Viejo Continente operaban con caídas en torno al 6 por ciento. En la capital financiera de Italia, aislada para intentar frenar la propagación del nuevo coronavirus, el principal índice perdió más de un 8% poco después de la apertura.

Y desde el arranque, los indicadores de Wall Street asimilaron esa tendencia, con bajas de 1,7% en su índice S&P.

La nueva sangría anticipaba otra sesión de gravedad para los vapuleados activos financieros de la Argentina, que en medio de la crisis crediticia y la recesión económica reciben el impacto directo de cualquier derrape en el extranjero.

La Bolsa española se hunde el 6,15 % en los primeros compases de la sesión de este lunes, hasta situarse en mínimos desde 2016, en una jornada en la que el precio de crudo Brent cotiza en caída libre, con un recorte de casi el 30 %, ante la guerra de precios desatada entre Arabia Saudí y Rusia. EFE/J.J. Guillén
La Bolsa española se hunde el 6,15 % en los primeros compases de la sesión de este lunes, hasta situarse en mínimos desde 2016, en una jornada en la que el precio de crudo Brent cotiza en caída libre, con un recorte de casi el 30 %, ante la guerra de precios desatada entre Arabia Saudí y Rusia. EFE/J.J. Guillén

Al respecto, el Riesgo País que describe las capacidades de pago de la Argentina, cerró la semana pasada a 2.414 luego de tocar brevemente los 2.500 puntos, su máximo desde el cimbronazo posterior a las elecciones primarias del año pasado.

"La epidemia contaminó la atmósfera de los mercados. Con las bolsas europeas y estadounidenses cayendo y el hundimiento del precio del petróleo, la epidemia es un catalizador" de la debilidad y las "contradicciones" de la economía mundial, dijo Shen Zhengyang, un analista de Northeast Securities.

El precio del barril de Brent cae desde el 15 de enero - AFP / AFP
El precio del barril de Brent cae desde el 15 de enero - AFP / AFP

En tanto, los analistas de Moody’s agregaron que "el riesgo de recesión mundial aumentó” y que el “retroceso prolongado del consumo, además del cierre prolongado de las empresas, atacaría los beneficios, conduciría a suprimir empleos y pesaría en el ánimo".

El petróleo sufrió este lunes una caída de cerca del 30% en Asia, la más importante desde la Guerra del Golfo de 1991, consecuencia de la decisión de Arabia Saudita de rebajar drásticamente sus precios tras el fracaso la semana pasada de sus negociaciones con Rusia.

"La caída de un 30% del precio del petróleo no tiene precedentes y está provocando una gran onda de choque en los mercados financieros", dijo Margaret Yang, una analista de CMC Markets.

Cifras al cierre de los principales mercados de Asia, el 9 de marzo de 2020 - AFP / AFP
Cifras al cierre de los principales mercados de Asia, el 9 de marzo de 2020 - AFP / AFP

El impacto en la economía Los mercados temen ahora una crisis de la economía real, a medida que la epidemia de coronavirus afecta a las cadenas de producción de todo el planeta, obliga a cancelar vuelos y eventos profesionales y hace caer el turismo.

La caída en las bolsas podría además provocar dificultades de financiación para la economía real, como ya ocurrió en la crisis financiera de 2008.

En Europa, el impacto del coronavirus sobre el crecimiento de la economía francesa será de "varias décimas de punto" del Producto Interior Bruto (PIB), advirtió el lunes el ministro de Economía Bruno Le Maire.

Alemania, que según los economistas es uno de los países más vulnerables por su economía, muy dependiente de las exportaciones, anunció varias medidas de apoyo pero no tan drásticas como esperaban los observadores.

Por su parte Japón parece dirigirse a la recesión, definida como una contracción del PIB durante al menos dos trimestres seguidos. Si se confirma sería la primera desde 2015.