Romano Boscarino: “No hay un plan, no hay un diagnóstico claro y no hay perspectivas favorables”

Analizó la economista la situación actual del país.

“Argentina ya lleva casi 11 años sin crecer sostenidamente, con ciclos permanentes. Picos y caídas muy fuertes. La verdad que pareciera que estamos acostumbrados, como que hubiéramos naturalizado, lamentablemente, esta situación que no es nueva”. Esto lo sostuvo la economista María José Romano Boscarino, en un programa televisivo donde analizó la crisis que vive económica nuestro país.

Al ser consultada sobre su impresión de lo que vive Argentina sostuvo lo siguiente:

“Ahora estamos viviendo una crisis diferente, muy profunda y creo que, además del dato de inflación, que ahora se dio el resultado de junio del 5,3, por ciento. De todo modo se está proyectando que llegue a más de 90 por ciento al final del año. Entonces, más allá de que se esté queriendo tomar cartas en el asunto hay que tener un buen diagnóstico sobre cuáles son esas causas de la inflación. Yo creo que el gobierno nacional no está haciendo un diagnóstico correcto en este sentido. Desde mi punto de vista, la inflación es un fenómeno monetario, como bien explicaba Severó, en el mundo, producto de la pandemia, por la emisión, se generó también. Ahora, en Argentina tenemos un problema estructural y que viene ya hace demasiado tiempo y que tiene que ver con que esa emisión está asociada a un déficit fiscal, producto de un gasto público desmedido de un gobierno que ha ido creciendo y que continúa creciendo. Un estado que ha ido creciendo y que eso repercute, por supuesto, también en la carga impositiva, además de los efectos inflacionarios que tenemos sobre el sector privado. Además, quiero aclarar que estamos en récord de riesgo-país. Estamos, de hecho, más que países que están en guerra. Es una locura. Nuestros bonos están cayendo notablemente. Tenemos récord también del número al que ha llegado el dólar, casi 300 pesos por dólar. El peso por el piso y, además, no nos olvidemos que tenemos más de 40 por ciento de pobreza. Digo todo esto, tiene un impacto social fenomenal y ni siquiera estamos entendiendo que el camino es a través de potenciar al sector privado, bajando el gasto, bajando los impuestos, bajando la carga burocrática. Es el generador de empleo genuino, es el que va a poder, por ejemplo, a través del campo y de otros actores exportar, traer esos dólares que necesitamos y empezar a llevar adelante este país, a través de un sendero muy distinto al que estamos viendo ahora. No hay un plan, no hay un diagnóstico claro y no hay perspectivas favorables. Lo que influye, por supuesto, en las expectativas de la gente ,respecto al futuro y la incertidumbre, nos hace mucho daño y por eso estamos viendo ahora como la gente especula con justa razón, porque no tiene los incentivos para no hacerlo, para tratar de cubrirse ante esta inestabilidad creciente que estamos viendo. No funciona”.

- ¿Cómo se puede salir adelante?

- Simplemente que tengo una admiración profunda por la sociedad argentina, pero sobre todo por el laburante y por aquellas personas que se levantan todos los días, sin mirar permanentemente la macro porque saben que la salida es el trabajo y el esfuerzo. Que tenemos que seguir contagiando esa cultura de trabajo que parece perdida. Recuperar esos valores que son tan necesarios, para tener una convivencia pacífica, para poder salir adelante, pero sobre la base de esos principios que en algún momento nos hicieron grandes. Que traigamos de nuevo esas experiencias y que tratemos como sociedad también, de pedir, de exigir, de no quedarnos callado y de seguir peleándola, aprovechando esa resiliencia, pero haciendo escuchar nuestra voz.