Ivermectina: Por qué su uso no es recomendable para personas con Covid-19

Frente a la enfermedad desconocida del coronavirus, muchas personas han optado por la automedicación. El miedo del contagio, la necesidad de sentirse protegido y la escasez de vacunas han llevado a algunos a probar distintos fármacos con la idea de armarse contra el Covid-19.

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Otros se han automedicado para tratar el virus, ya que no existe un tratamiento exacto. Muchas personas con síntomas compatibles con el Covid-19 han afirmado tomar medicamentos sin prescripción médica, con la esperanza de pasar un cuadro más leve o acortarlo.

Uno de los fármacos que muchas personas están utilizando con este fin es la ivermectina, ya que se han viralizado informes que indican que su uso frena el virus. Sin embargo, su uso para prevención o tratamiento contra el coronavirus no está aprobado y no debe utilizarse para tal fin.

Para conocer más sobre las razones de por qué no debe utilizarse la ivermectina contra el coronavirus, Vía Mendoza dialogó con el doctor Sergio Saracco, quien actualmente preside la Asociación Toxicológica Argentina.

Qué es la ivermectina

La invermectina es una droga antiparasitaria utilizada en los humanos y animales. Es comúnmente utilizada por los veterinarios para animales con parásitos o para su prevención, como las pastillas que solemos darles a nuestras mascotas.

En los humanos suele recetarse el fármaco como tratamiento contra parásitos tales como la escabiosis, los piojos o los que provocan la oncocercosis, con dosis definidas por el médico.

En esos casos ya estudiados y definidos, la ivermeticina sí está aprobado para su uso. Pero, este medicamento no está aprobado para su uso en la prevención o tratamiento contra el coronavirus. Según Saracco la razón es simple: “Hasta el momento, no hay evidencia científica que demuestre su eficacia”.

Si bien en los laboratorios se ha descubierto que la droga es un potencial inhibidor de la recopilación viral de SARS-CoV-2, esas investigaciones solo se ha constatado en el análisis in vitro. Trasladado al lenguaje común, las investigaciones que demuestran que la ivermectina frena el virus han sido solamente analizado en células y ratas.

Asimismo, estos análisis sugieren que para alcanzar la efectividad que se logró in vitro en los humanos, deberá aplicarse una dosis potencialmente tóxica. “Para un efecto antiviral se necesita una dosis cincuenta veces la concentración máxima de una dosis común de ivermectina”, explicó Saracco.

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Factores a tener en cuenta

El uso de ivermectina para la prevención y tratamiento contra el coronavirus no está aprobada por ningún organismo, incluido los nacionales como la ANMAT o internacionales como la FDA (Estados Unidos) y la EMA (Unión Europea). La OMS también se refirió al respecto, señalando que no debería utilizarse con este fin.

Este fármaco no está indicado con tal uso ya que puede producir efectos secundarios adversos graves. Si uno toma dosis de ivermectina como se ha estado viralizando, podrá sufrir de toxicación y riesgo hepático y renal.

“Cuando se utiliza un medicamento siempre se debe evaluar que los potenciales beneficios sean mayores que los riesgos asociados a su ingesta. En este caso, la ivermectina es peligrosa ya que puede resultar en una toxicación”, detalló el médico especializado en toxicología.

El discurso que ha crecido alrededor de la ivermectina es muy parecida a la que se escuchó con la hidroxicloroquina. Numerosas cadenas de whatsapp o posteos en Facebook aseguraban que estas drogas eran el remedio mágico contra el coronavirus.

Sin embargo, Saracco afirma que estas cadenas sin fundamentos médicos reales no funcionan así y que son peligrosos, convirtiéndose “más cuestión de fe que farmalógico”. Por ese motivo, se le pide a los mendocinos no medicarse sin la receta o indicación de algún médico matriculado.