Las asociaciones que nuclean a las clínicas de la provincia de Córdoba resolvieron levantar provisoriamente la protesta contra la obra social provincial Apross, y atender a los 620 mil afiliados con normalidad. La decisión fue tomada en la tarde de este jueves, después de que las entidades resolvieran sentarse a negociar una actualización de aranceles con el Ministerio de Salud provincial.
La información fue confirmada por Gustavo Bilbao, secretario de la Cámara Empresarial de Salud de Córdoba (Caescor), una de las entidades que puso el grito en el cielo y amenazó con cortar drásticamente las prestaciones a los afiliados a partir de este viernes. Las clínicas reclaman una actualización de aranceles, que no se incrementaron desde abril del año pasado, entre otras cuestiones.
“Estamos llenos pero nos va mal. Las clínicas y sanatorios tenemos que aumentar los sueldos al personal, actualizar el equipamiento y financiarnos con los aranceles de las obras sociales”, indicó Bilbao.

A partir de este viernes, las clínicas se sentarán a negociar directamente con el Ministerio de Salud de Córdoba. La Provincia aporta el dinero por cada afiliado, en su mayoría empleados públicos del estado. La falta de actualización de aranceles, entre otras cuestiones, motivó a muchos centros de salud privados a dejar de brindar servicios a la Apross. Tal es el caso del Sanatorio Allende, Clínica Reina Fabiola e Instituto Modelo de Cardiología, informó Caescor.
Las entidades pedirán la actualización de los montos hasta octubre y plantearán un aumento progresivo sobre la base de distintos cálculos que tuvieron en cuenta la inflación, el valor de los alimentos y de los medicamentos, entre otras.
Por su parte, el Consejo de Médicos de Córdoba alertó en un comunicado la crítica situación que atraviesan médicos y beneficiarios “que se han convertido en rehenes de este modelo en conflicto”.