Fernández pidió que le aprueben la reforma judicial pero Massa y Máximo no consiguen votos

El Presidente aseguró que la iniciativa "busca que tengamos jueces dignos, éticos, moralmente irreprochables, técnicamente preparados".

(AP Photo/Natacha Pisarenko)
(AP Photo/Natacha Pisarenko)

A 27 días de que finalice el período ordinario de sesiones del Congreso, el presidente Alberto Fernández movió el avispero de la Cámara de Diputados, que conduce Sergio Massa, al reclamar pública y enfáticamente que se trate la media sanción del Senado a la reorganización de la Justicia Federal, un proyecto suyo que no cuenta con el apoyo suficiente para convertirse en ley.

El Senado, con la mayoría tenaz que lidera Cristina Fernández de Kirchner, le dio media sanción al proyecto, ideado por el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, el 31 de agosto.

Desde entonces transcurrieron más de dos meses y la Cámara Baja se dedicó al Presupuesto 2021, dejando a la ley judicial del Presidente en el cajón.

(JUAN MABROMATA / AFP)
(JUAN MABROMATA / AFP)

Es que, tal como explicó este medio en los días siguientes, ni Massa ni el líder del bloque Frente de Todos (FDT) de Diputados, Máximo Kirchner, consiguieron hasta ahora el número necesario de votos para que la iniciativa se convierta en ley.

Qué dijo el Presidente

"Yo sigo esperando que la Cámara de Diputados se digne a tratar la reforma que he propuesto para la Justicia Federal. Que acá, en la provincia de Buenos Aires, busca que tengamos herramientas para juzgar al crimen organizado rápidamente", dijo Fernández, al cerrar un acto junto al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, en la inauguración de obras de un centro judicial en el municipio de Avellaneda.

"No busca que yo ponga jueces amigos ni los traslade de un lugar a otro, ni los ponga como subrogantes del juzgado que me conviene, busca que tengamos jueces dignos, éticos, moralmente irreprochables, técnicamente preparados para que la ciudadanía tenga la Justicia que se merece", completó el Presidente.

En su discurso —formulado minutos antes de que la Corte Suprema de Justicia dispusiera en un fallo mantener en sus cargos, aunque de manera provisoria, a los jueces que habían sido desplazadas por Cristina a través del Senado— Fernández defendió el proyecto de ley empantanado en Diputados.

La iniciativa forma parte del paquete de reforma judicial, junto a otras propuestas que dentro de dos semanas dará a conocer un comité de juristas de renombre, en pos de "mejorar el funcionamiento" —así lo definieron— de la Corte Suprema de Justicia, el Ministerio Público Fiscal y el Consejo de la Magistratura de la Nación.

Máximo Kirchner (Foto: Télam)
Máximo Kirchner (Foto: Télam)

"Es necesario que la Justicia funcione y esto quiere decir que tengamos jueces técnicamente preparados, jueces moralmente probos y una Justicia rápida", dijo el Presidente y cuestionó al gobierno de su antecesor, Mauricio Macri: "Los espías entre los jueces no son una buena idea, no fueron una buena idea. Usar a los jueces para perseguir opositores no fue una buena idea. Presionar a gente para que se arrepienta e involucre a otros en las causas no fue una buena idea. Eso no es el Estado de Derecho, eso es el mal uso de las instituciones de un gobierno de turno".

"Buscan impunidad"

En la oposición no acusaron recibo de las palabras del Presidente. Muy por el contrario, señalan que su queja está dirigida a Massa y Kirchner, que son los responsables de lograr que la iniciativa avance.

El presidente del interbloque de diputados de Juntos por el Cambio (JPC), el radical Mario Negri, evaluó que "el fallo de la Corte Suprema envalentonó al Presidente", que ahora "pide que Diputados trate urgente la reforma judicial y cuestiona la ley del arrepentido, que permitió avances de causas de corrupción". "No persiguen una mejor Justicia, buscan impunidad", dijo el legislador por Córdoba.

Es sabido que JPC rechaza de cuajo el proyecto de ley. La incógnita es ahora ver si el resto de la oposición, a la que el oficialismo echa manos para aprobar leyes —porque en Diputados son minoría, no mayoría— se ablandará tras el golpe en la mesa de Fernández, o no pasará nada.

"A nosotros, en particular, esto no nos altera nada, porque ya hemos tomado posición. El que tiene que definir qué hacer Massa. Que diga cómo sería su voto en caso de tener que desempatar", dijo a Vía País un diputado de la "Corea del Centro" de la Cámara.

Por la corresponsalía de Buenos Aires.