Amantes, estupefacientes y dos veces preso: la tumultuosa vida del padre de Georgina Rodríguez

Llega una nueva temporada de Soy Georgina, reality de la pareja de CR7, en la que podría revelar nuevos detalles de su complejo pasado familiar.

Georgina Rodríguez y el recuerdo de su padre
Georgina Rodríguez y el recuerdo de su padre Foto: collage vía país

Si bien comenzó siendo conocida como “la pareja de Cristiano Ronaldo”, hoy Georgina Rodríguez es una exitosa modelo y empresaria. Desde que empezó a ser vinculada con el deportista a hoy, ha protagonizado reportajes, revistas de moda y programas de televisión. Pero si algo terminó de impulsar su fama fue el documental Soy Georgina, lanzado por Netflix en 2022.

Georgina y Cristiano nos mostrarán más detalles de su vida en familia en la nueva temporada del reality
Georgina y Cristiano nos mostrarán más detalles de su vida en familia en la nueva temporada del reality Foto: Google

Ahora llega una segunda temporada del reality, en el que seguramente nos muestre cómo a avanzado su vida junto al astro del fútbol en estos últimos meses: cambios de clubes, un mundial entre medio y la dolorosa pérdida de un hijo son algunos eventos acontecidos. Pero si bien hay muchos aspectos de la vida de Georgina que la gente conoce, hay otros de los que ella no habla tanto, como su padre argentino: estuvo preso y distanciado de sus hijas hasta el día de su fallecimiento.

Quién fue Jorge Rodríguez, el padre de Georgina Rodríguez

Georgina Rodríguez hoy se considera principalmente española, pero su sangre es también argentina. Nació el 27 de enero de 1993 en Buenos Aires, pero vivió toda su vida en el norte de España, en Jaca (Huesca). Su padre era argentino, de nombre Jorge Rodríguez, y su madre, española, de nombre Ana María Hernández.

“Mi padre es argentino y mi madre es de Murcia. Fueron a Buenos Aires con mi hermana Ivana para que ellas conocieran a la familia de mi padre. Decidieron quedarse un tiempo allí y nací yo. Mi padre intentó convencer a mi madre para vivir en Argentina, pero no lo consiguió y, cuando yo tenía un año, regresaron a Murcia. Después, nos trasladamos a vivir a Jaca”, explicó en una entrevista.

Jorge Rodríguez, padre de Georgina Rodríguez
Jorge Rodríguez, padre de Georgina Rodríguez Foto: redes

En uno de los episodios de la primera temporada del reality, Georgina se lamentaba no tener al padre con ella para poder compartir su vida de lujos junto a él. Es que en el medio hubo distanciamientos y elecciones complejas: su primera mujer fue María Jesús, a quien conoció en Elche; mientras que Ana María, la madre de Georgina e Ivana, fue “la segunda” de la relación. De su primera relación con María Jesús nacería Patricia Estela, hermanastra con la que Georgina no tiene cercanía.

Un triste final para Jorge Rodríguez

Jorge buscó arreglárselas como pudo en España, principalmente con trabajos menores, como una hamburguesería que abrió con su amante y que terminó de fallar, como lo haría la misma relación. Pero su vida errante tomaría un turno que nadie había visto venir cuando empezó a cometer actor ilícitos: estuvos dos veces en prisión acusado de integrar una banda que comercializaba y distribuía estupefacientes.

Mi padre tenía una pistola y se encerraba en una habitación de la casa, un día mis hermanas y yo entramos y mi padre estaba preparando unos paquetes, cuando le pregunté qué era eso me dijo que eran paquetes de comida para los pobres”, relató Georgina en una entrevista con la TV española al recordar cómo fue la primera vez que vio a su padre armar paquetes de droga.

El adiós a su padre, una gran herida emocional para Georgina
El adiós a su padre, una gran herida emocional para Georgina Foto: Twitter

Cumplida su pena, fue extraditado a Argentina, pero esto no hizo más que profundizar el distanciamiento con sus hijas, que se quedaron en España. Cuando pensaba regresar a Europa, un derrame cerebral complicó los planes, dejándole el lado izquierdo del cuerpo paralizado.

Si bien Georgina y su hermana Ivana contrataron a una persona para que lo atiendan y lo visitaron en sus frecuentes viajes a Buenos Aires, el distanciamiento era profundo y un 27 de enero de 2019 se enteraron que Jorge había muerto a los setenta años. A día de hoy, este agridulce final parece haber dejado una profunda marca en Georgina.