Cuarentena: disminuyó un 68% la cantidad de pacientes que va a la guardia del hospital

Las salas de urgencias está prácticamente vacías. Sin embargo aún hay mucha gente en las calles.

San Rafael, Hospital Schestakow
San Rafael, Hospital Schestakow

Las guardias de los hospitales hacen las veces de termómetro para intentar medir como es el cumplimiento de la cuarentena obligatoria para prevenir el coronavirus, en el sur mendocino.

Desde que se declaró la emergencia sanitaria por la pandemia y hubo un cambio sustancial de la atención en salud, las salas de urgencias quedaron prácticamente vacías.

"Con esto vemos que muchas de las supuestas urgencias de la gente que llenaba la sala no eran tales", confió uno de los médicos que trabaja en el hospital Schestakow en San Rafael.

Según informó el diario Los Andes, en el hospital cabecera del sur mendocino se redujo un 68% la asistencia de personas que llegan buscando atención médica.

En el hospital Enfermeros Argentinos en General Alvear o el Regional en Malargüe también sucede lo mismo o incluso es menor la cantidad de pacientes que requieren los servicios en la guardia.

Pese a todo, en la mirada de la Policía, todavía "hay demasiada gente en la calle".

La cantidad de vecinos que no están en sus casas es importante principalmente en el horario de apertura del comercio con preeminencia entre la mañana y el mediodía.

Tampoco faltan los que van a comprar al almacén del barrio y lo utilizan como una salida más social que comercial.

"Salvo excepciones, la mayoría de las familias vienen a comprar tres o cuatro veces al día en las horas que tenemos abierto el negocio, compran dos o tres productos y al rato vuelen por otros", comentó Mariela, propietaria de una despensa en barrio Martín Güemes, uno de los más populosos de la zona sur de la ciudad de Malargüe.

Para el jefe de la Policía en San Rafael "es un desastre, hay demasiadas personas en la calle durante el día porque van al cajero o a comprar, por eso nos pusimos firmes y empezamos a pedir los ticket", dijo el comisario Miguel Sánchez.

En cambio al caer la tarde y en la noche "las calles quedan desiertas", agregó Sánchez, no obstante "la mayor cantidad de detenciones hasta el momento por violar la cuarentena fue durante el horario nocturno", concluyó. En Alvear y Malargüe la situación es calcada.