En paralelo con el inicio del juicio a Esteban Alvarado, este lunes condenaron a la exsuegra de un supuesto cómplice del hombre apuntado como el mayor enemigo de “Los Monos” en Rosario. La mujer se declaró culpable por lavado de activos en la venta del departamento de Puerto Norte donde detuvieron a un policía ligado a la banda narcocriminal.
A partir del acuerdo entre la Fiscalía y la defensa, Bibiana Judit Zárate accedió a una pena de 3 años de prisión condicional. Como coautora del hecho que le imputaron en relación a las propiedades de Condominios del Alto, aceptó una multa por el doble del monto de la operación que investigó la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos.
La mujer de 59 años es la madre de la expareja de Luciano Privitera, uno de los presuntos integrantes de la banda de Alvarado. A través del procedimiento abreviado que homologó la jueza Silvia Castelli, reconoció haber comprado un departamento, dos cocheras y una baulera en el complejo habitacional como parte de un plan para blanquear los ingresos de la red criminal.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) detectó que la propiedad fue objeto de transferencias sucesivas y la última dueña fue la esposa del excomisario Javier Makhat. Este último fue uno de los jefes policiales detenidos condenados como parte de la organización liderada por el supuesto narcotraficante en Rosario. El uniformado vivía allí con su familia cuando lo detuvieron en Puerto Norte.
Zárate fue el penúltimo eslabón de una cadena que conecta tres ventas en menos de dos años. El primero está representado por Damiana Ghirardi (48), una comunicadora y decoradora que puede llegar a ser castigada con 6 años de prisión efectiva y una multa de $407.962.500 al final del juicio.
Fuentes oficiales confirmaron que la exsuegra de Privitera deberá pagar 3.300.640 pesos por la maniobra de lavado de dinero en Puerto Norte. En el plazo de ejecución condicional, debe obtener o acreditar ingresos lícitos y tiene prohibido todo contacto con otras personas imputadas en la causa.
