La empresas propietarias de los omnibus del servicio público de pasajeros de Mendoza, debieron “atornillar” las ventanillas de los colectivos para que queden abiertas. Y garantizar de esta manera una cierta circulación de aire en las unidades, en medio de la segunda ola de Covid-19 que enfrenta el país.
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El problema surgió que al registrarse por la mañana temperaturas más bajas que las del verano, mucha gente optó por cerrar las ventanas de los micros, impidiendo la circulación de aire, una medida clave para prevenir los contagios de Coronavirus.
Cabe destacar que la Resolución 213 de la Secretaría de Servicios Públicos de la Nación obliga mantener al menos una ventanilla abierta en la unidad. El argumento de la Secretaría de Transporte Público de la provincia explica que esta decisión responde a la necesidad de “continuar con la aplicación de medidas de prevención y seguridad sanitaria que permitan disminuir los riesgos de contagio de Covid-19 de los usuarios del servicio público de transporte regular de pasajeros urbano y de media y larga distancia”.
De todas maneras aclararon que muchas veces son los propios pasajeros los que optan por cerrar el vidrio, sometiendo a todos los transportados a un mayor riesgo de contagio. A raíz de ésto las empresas en conjunto con la Secretaría optaron por una medida más drástica e inviolable, decidieron atornillar las ventanillas para que queden abiertas y nadie incumpla la medida que apunta, precisamente, a cuidar a la ciudadanía.
“El #TransportePúblico de Mendoza ya circula con ventanillas abiertas fijas para asegurar la circulación del aire en las unidades”, posteó en Twitter Autam, la cámara que aglutina a las empresas que prestan el servicio.
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En la publicación insistieron en que es responsabilidad de todos mantener las medidas tendientes a disminuir la circulación del virus. Mientras que reiteraron desde la cuenta los consejos para viajar en micro, como abrir las ventanillas, usar barbijo que cubra nariz, boca y mentón, evitar hablar o usar el celular, no comer o beber en las unidades, entre otros.
Para la prevención y evitar así el contagio de Covid-19 el tema del transporte público es clave. El gobernador Rodolfo Suárez decidió no aplicar las restricciones recomendadas desde la Nación, pero si optó por avanzar con algunos cambios tendientes a disminuir la concentración de gente en las unidades.
Es que entienden, precisamente, que el aglutinamiento de personas en los colectivos es un factor de mayor riesgo de transmisión. Por eso, la estrategia que manejan desde la Casa de Gobierno apunta a bajar la concentración en horarios picos, con un sistema de horarios escalonados para el ingreso escolar, laboral y comercial. Fuente Sitio Andino
