Leonela Ayala (25) fue detenida junto a su pareja por el crimen de su sobrina, Sheila Ayala (10), ocurrido en el barrio Trujui de San Miguel, hace un mes. Sin embargo, este lunes quedó en libertad en las primeras horas del lunes, según consignó TN.
La mujer seguirá imputada en la causa y no podrá recuperar todavía la tenencia de sus cuatro hijos. Sin embargo, este domingo venció el plazo de detención y el fiscal Gustavo Carracedo, quien está a cargo de la investigación, no pidió la prisión preventiva.
En su indagatoria, la mujer había complicado aún más al padre de sus hijos, Fabián Esequiel González Rojas (24). Ante el fiscal, dijo que el domingo en el que desapareció Sheila no estuvo en su casa entre las 12 del mediodía y las 6 de la tarde, aproximadamente.
La mujer presentó los informes de la tarjeta SUBE que fundamentan su coartada. "Los registros la muestran entre cinco y seis horas afuera de su casa aquella tarde", dijo a Clarín una fuente del caso.
Leonela Ayala seguirá imputada en la causa, aunque lo más probable es que sea acusada por un delito menor al de "homicidio agravado por alevosía". González es el único detenido que queda: el hombre tenía rasguños en un brazo al momento de su detención y, según un testigo, cambió radicalmente sus hábitos el día que Sheila fue asesinada.
El caso
El 18 de octubre pasado, el cuerpo de Sheila apareció tirado adentro de una bolsa de basura en una medianera lindera a la casa de la pareja. La nena estaba desaparecida desde el domingo anterior, cuando se encontraba jugando en la puerta de su casa ubicada en el predio "Campo Tupasy".