Ximena Suárez, una de las azafatas que sobrevivió a la tragedia aérea del club Chapecoense, apenas recuerda el instante final. Pero, según adelantaron los investigadores, cuando se recupere su testimonio será clave para determinar las causas que provocaron la caída del charter de la empresa Lamia y la muerte de 71 personas.
"Las luces se apagaron y no recuerdo más hasta ahora", expresó la mujer, de nacionalidad boliviana, a una funcionaria del gobierno de Antioquia en el momento del rescate. Suárez reveló que las fallas comenzaron casi un minuto antes de que el avión toque tierra, pero no pudo precisar mucho más.
"Lo poco que ella habló fue que se empezaron a apagar las luces paulatinamente y que a los 40 a 50 segundos sintió el estallido. Hasta ahí se acuerda", indicó uno de los funcionarios que estaba en el lugar de rescate. La azafata sufrió fracturas en los brazos, piernas y cuello, pero su familia informó que se encuentra fuera de peligro.