Un fiscal de Venado Tuerto está en la mira de la Justicia por mantener un diálogo muy fluido con una persona sospechada por venta de droga, a quien le habría suministrado información de interés para una causa por robo de armas. Fue apartado temporalmente de algunas causas y la Legislatura deberá definir si lo remueve del cargo.
Se trata del fiscal adjunto de la mencionada localidad, Mauro Blanco, a quien el fiscal federal Javier Arzubi Calvo le encontró comunicaciones telefónicas con David R., investigado por venta de estupefacientes, según publicó el diario La Capital.
Tras una serie de seguimientos, se pudo observar la llegada de un hombre que podría ser Blanco al domicilio del presunto dealer. Lo hizo en un vehículo oficial del Ministerio Público de la Acusación (MPA). Un allanamiento a esa vivienda dio como resultado el secuestro de dos armas de fuego y plantas de marihuana.
De acuerdo a la investigación, Blanco le habría brindado información precisa que el dealer habría usado para mejorar su situación en una causa por robo de armas, la cual no había quedado asentada en ningún expediente.
Ante ello, se decidió apartar al fiscal de muchos legajos pero no completamente de sus funciones. No obstante, se encuentra con licencia médica. Ahora se investiga si Blanco cometió algún tipo de delito.
Su caso fue remitido a la Comisión Bicameral de Acuerdos de la Legislatura, que deberá definir el pedido de inhibición de la Auditoría del MPA.