El pasado domingo una situación insólita sucedió en la localidad santafesina de Santo Tomé. Un joven que había sido detenido acusado de violencia de género se escapó aún esposado de la policía y la persecución quedó registrado en video por una cámara de seguridad.
Todo sucedió el domingo por la tarde, cuando una mujer de 21 años se acercó a la Comisaría 23 de la ciudad para radicar una denuncia contra el adolescente de 16, con quien convive en la casa de su madre. Según lo que relató la víctima, el joven la golpeó y azotó su cabeza contra un árbol en presencia de sus hijos, que no pudieron hacer nada para detener al agresor. Además, sostuvo que fue amenazada de muerte varias veces por quien es su pareja.
Como consecuencia de esto, oficiales de la policía se acercaron al domicilio citado por la denunciante y realizaron una requisa para luego detener al adolescente y trasladarlo a la dependencia policial, mientras se informaba a la Justicia de Menores y se notificaba a los padres.
¿Cómo fue la persecución?
Fue en el momento en el que los progenitores se presentaron para retirar al menor, que sucedió el extraño episodio. Lejos de querer irse con sus padres, el adolescente se escapó corriendo aún con las manos esposadas en la espalda, por lo que un efectivo policial tuvo que salir detrás para recapturarlo.
La situación quedó grabada por cámaras de seguridad de la zona, que registraron una parte de la persecución. El agresor fue alcanzado posteriormente y encausado como autor de lesiones dolosas y amenazas calificadas en el marco de violencia de género, para ser liberado unos minutos más tarde.
