Piqueteros tomaron una iglesia y el cura llamó a la Policía

Ocurrió en la Catedral de San Juan. Los piqueteros querían que el arzobispo interceda en su pedido de viviendas.

Los piqueteros entraron corriendo a la Catedral y se quedaron en el interior.
Los piqueteros entraron corriendo a la Catedral y se quedaron en el interior.

Se viven momentos de tensión en la Catedral de San Juan porque un grupo de 200 piqueteros del Polo Obrero tomaron la iglesia. Según publicó Diario de Cuyo, los manifestantes querían que el arzobispo Monseñor Jorge Lozano intercediera por ellos, ante el Gobierno de San Juan, para que les entreguen viviendas del IPV.

La marchad del Polo Obrero fue en horas de la mañana, en el Centro Cívico de San Juan, donde se concentra toda la actividad pública, en la Capital de la provincia. De ese edificio los manifestantes se fueron hasta la Catedral, frente a la Plaza 25 de Mayo, la central de la provincia, y se metieron corriendo al templo. En el lugar fueron recibidos por el párroco que rezó junto a ellos y les otorgó una bendición pero no deponían su actitud de retirarse de la Catedral.

Los piqueteros entraron corriendo a la Catedral y se quedaron en el interior.
Los piqueteros entraron corriendo a la Catedral y se quedaron en el interior.

Ante este panorama, el sacerdote tuvo que trasladarse a la Comisaría 1era para radicar la denuncia y en el lugar todavía hay fuerte presencia policial. Es que los piqueteros no quieren abandonar el lugar y es por esto que varios uniformados quedaron apostados en el lugar para controlar la situación.

"Somos más de 200 familias esperando una respuesta para ver si los compañeros son censados y así puedan pagar una cuota previa. Necesitamos vivienda, trabajo, salud y educación. Queremos trabajar", aseguraron desde el movimiento obrero al diario local. Todavía no hay detenciones y hasta el momento la toma continúa de forma pacífica pero con fuerte presencia de la Policía de San Juan. 

Los piqueteros entraron corriendo a la Catedral y se quedaron en el interior.
Los piqueteros entraron corriendo a la Catedral y se quedaron en el interior.