Uno de los imputados por el femicidio de Jimena Salas comenzó una huelga de hambre

Luego de que el Tribunal de Impugnación de Salta decidiera revocarle la prisión domiciliaria a Carlos Damián Saavedra, el mayor de los tres hermanos investigados por el femicidio de Jimena Salas, el imputado decidió comenzar una huelga de hambre una vez que regresó a la celda.

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Fue el juez Eduardo Barrionuevo quien ordenó quitarle ese beneficio al detenido. Una vez que regresó a la Alcaidía Judicial comenzó esta protesta por las idas y vueltas judiciales. En tanto, Javier Saavedra, el más complicado de todos, amenazó con comenzar con la huelga él también.

Por su parte, los abogados defensores, Marcelo Arancibia e hijo, aseguraron a Nuevo Diario que apelarán el fallo que devolvió a la cárcel a Carlos Damián Saavedra. Consideraron un derecho ganado el beneficio del arresto domiciliario, otorgado el 2 de mayo por la magistrada Ada Zunino.

Habían sido los fiscales Leandro Flores, Gabriel González y Mónica Poma, quienes apelaron la resolución de la jueza. Es por esto que Barrionuevo dio lugar a los dichos de los funcionarios judiciales y le quitó este beneficio al acusado.

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Por un lado, analizaron la posibilidad de que el imputado se dé a la fuga estando desde su domicilio y, además, que entorpezca la investigación. En tanto, descubrieron que la jueza de garantías se equivocó en sus argumentos.

La misma había indicado que Saavedra tenía arraigo laboral, pues trabaja desde 2008 en la empresa Aguas de Salta y pertenece a la planta permanente. Pero comprobaron que esto no es así, pues quien trabaja en esa firma es Adrián Guillermo Saavedra, el segundo de los hermanos acusados.