Mandó a matar a su exempleado en Rosario y le dieron 11 de años de prisión

Hace un año y medio, Lucas Farruggia quedó detenido como el presunto instigador de un intento de homicidio en Rosario. A partir de un acuerdo con la Fiscalía, este lunes se confirmó que lo condenaron porque mandó a matar a su exmpleado y recibió una pena de 11 años de prisión efectiva.

Afirman que el empresario que encargó un crimen quería eliminar a la competencia

De acuerdo a la investigación, el dueño de Nutrilab pagó por una balacera sobre Avenida del Rosario al 2700. El ataque perpetrado la tarde del 21 de abril de 2021 fue preparado por varios delincuentes con el objetivo de asesinar a un hombre que había trabajado en su compañía, pero la víctima resultó ilesa.

Integrantes del Ministerio Público de la Acusación (MPA) plantearon que el imputado recurrió a una empresa de sicariato que tenía conexiones con el narcotraficante Esteban Alvarado. A través de un intermediario, envió información sobre el destinatario de los disparos para que los tiradores armaran la emboscada en la zona sur de Rosario.

Rechazan liberar al presunto intermediario que cobraba por balaceras en Rosario

Farruggia ofreció $ 500.000 a cambio del asesinato. Los fiscales creen que el objetivo final era eliminar a un nuevo competidor en el negocio de los suplementos nutricionales, pero la balacera falló.

Tras ese ataque, los instigadores empezaron a preparar otra emboscada y contrataron a Uriel Alejandro Reynoso para llevarla a cabo. Sin embargo, el tirador fue detenido por la Policía Federal antes del crimen programado para el 10 de mayo.

Plata para eliminar a la competencia y defender a un sicario en Rosario

Según fuentes oficiales, el juez Carlos Leiva homologó este viernes el procedimiento abreviado por el que el empresario rosarino aceptó la condena. El acuerdo se cerró en torno a la figura de homicidio calificado por precio y por la participación de dos o más personas en grado de tentativa.

Entre otras cuestiones, la Fiscalía confirmó que Farruggia no solo pagó por el asesinato fallido. El intermediario Germán Ponce también recibió dinero para pagar la defensa penal de Reynoso mientras estaba detenido por el primer ataque.