Mientras provincia y municipios estudian alternativas para avanzar en la flexibilización de la cuarentena en territorio santafesino, el gobierno de Omar Perotti recién en los últimos días comenzó a recibir un importante volumen de insumos médicos que se adquirieron en el mercado chino y del que hasta esta semana habían arribado tanto a la capital provincial como a la ciudad de Rosario donde se almacena la mercadería, solo el diez por ciento de la compra total.
Aunque oficialmente las autoridades del Ministerio de Salud mantienen el dato en reserva, fuentes ligadas a dicha cartera indicaron a Vía Rosario que se trataría de una partida de 1.100 millones de pesos la destinada a la adquisición de elementos que en su mayoría son barbijos, guantes, máscaras y batas, que fueron importados desde el país asiático debido a que es el único mercado capaz de hacerle frente a la demanda mundial existente.
Apelando a la emergencia por el coronavirus que irrumpió en Argentina en marzo, la administración Perotti logró que la Legislatura le permitiese tomar deuda por 15 mil millones de pesos para equipamiento e infraestructura y precisamente en dicha facultad se apalancaron para el encargue a China, en el que no hubo licitación alguna.
Tampoco existió concurso de precios en la adquisición de insumos que se consiguieron en un puñado de proveedores argentinos a los que a algunos incluso se les pagó por adelantado para afrontar la urgencia. En torno a dicha práctica, justificada a todas luces ante la pandemia, el gobierno provincial no ha informado el monto exacto que se ha desembolsado hasta el momento.
Cien millones
A partir de un relevamiento hecho por Vía Rosario a través del portal de compras que administra la Subsecretaría de Contrataciones y Gestión de Bienes del Ministerio de Economía, se desprende que hasta el 3 de junio se invirtieron $101.653.896,20 en la adquisición de insumos a proveedores nacionales. A la cifra se llegó sumando los ítems adquiridos por gestión directa detallados en la base de datos con el título "covid-19".
Se trata de encargues en su mayoría realizados por el Ministerio de Salud, aunque también los hay de la cartera de Seguridad. Frente a la falta de información oficial que sintetice los gastos realizados para hacerle frente al coronavirus, el relevamiento posibilita sólo una aproximación al desembolso, ya que no mensuró, por caso, la adquisición de insumos que pueden haber sido destinados a la pandemia, pero no fueron inscriptos en el portal de compras mencionando ése propósito. Además, desde la propia área de Contrataciones y Gestión de Bienes confirmaron que “puede haber demora en la carga de la información”.
Así y todo de la nómina de insumos adquiridos desde el 18 de marzo al 18 de mayo (fecha de la última compra publicada) se adquirieron de empresas argentinas 385.200 barbijos de uso médico, 42.540 cajas de guantes de látex por 100 unidades cada una y 438.950 camisolines; solo por mencionar algunos artículos.
"Se trata de elementos tan o igual de importantes que la cantidad de camas críticas o camas generales, que como sabemos, ya están aseguradas, pensando en un escenario de brote. Son barbijos, mamelucos camisolines, mascarillas de protección facial, guantes, entre otros", enumeró Sonia Martorano, segunda en la línea de mando en el Ministerio de Salud, pero quien lleva la voz en torno a las acciones para contener el covid-19 en Santa Fe. Sus dichos fueron vertidos mientras realizaba una visita a "La Redonda" sitio en la ciudad de Santa Fe que fuera un complejo cultural durante la gestión del socialismo en la provincia y que ahora se reconvirtió a depósito de las cajas con insumos médicos provenientes de China.
Respiradores
A diferencia de otras provincias, tal el caso de Córdoba que avanzó en importaciones propias, el gobernador Omar Perotti se limitó a recibir los respiradores -fundamentales para los pacientes críticos de covid-19- que envió Nación. "Santa Fe siguió la sugerencia de Nación y delegó en ellos la compra de respiradores, quienes además son los que manen la distribución a las provincias según los factores de riesgo y los equipos existentes antes de la pandemia", explicó Eduardo Monti, subsecretario de Planificación y Fortalecimiento Institucional del Ministerio de Salud, en contacto con Vía Rosario, sobre el operativo para recibir respiradores.
Así al 5 de junio -último dato informado- Santa Fe tiene 650 respiradores habilitados, 247 de los cuales están en el ámbito público y 403 en centros de salud de gestión privada. "Todos los sábados llegan respiradores", indicaron voceros de la cartera sanitaria santafesina sobre los envíos que hace Nación.
Según datos que la propia Martorano reportó a mediados de mayo, antes de la irrupción del covid-19 existían en el sistema hospitalario 150 equipos, es decir que el número de respiradores en los hospitales públicos santafesinos subió hasta el momento un 65 por ciento.
La cartera sanitaria provincial dice tener 917 camas críticas distribuidas en 70 "Centros Covid", como se denominó a los espacios públicos y privados capaces de atender a los pacientes críticos. Luego está están los 283 centros de aislamiento para pacientes con sintomatología leve que suman 8.197 camas.
Hospital modular
Con la curva de contagios aplanada en Santa Fe, desde el Ministerio de Obras Públicas de la Nación prometieron que el hospital modular que se levantó pegado al Policlínico Eva Perón ubicado en la localidad de Granadero Baigorria, en el Gran Rosario, recién estará equipado en dos semanas. Originalmente había anunciado que estaría listo a fines de abril, pero todavía no tiene respiradores artificiales ni camas de terapia intensiva.
