Santiago “Buenas Ondas” Morales es una de las figuras tradicionales de la Fiesta Nacional de la Vendimia. Es el “chambelán real” que en cada elección de la nueva reina nacional acompaña a las candidatas hasta el centro del escenario. Y como siempre, este 4 de marzo saldrá con su particular esmoquin pero con un extra emotivo: festejar sus 50 años de Vendimia.
Feliz expresada en su sonrisa, Morales muestra su brillo, por dentro cuando se dialoga como por fuera cuando sube al escenario. No pasa desapercibido en esa función ganada más por arrastre de los años que por algún gobierno en particular. Es todo un showman que le puso su sello propio a la fiesta mendocina.
Fue en 1973 cuando se le ocurrió hacer algo impensado en el estructurado formato de la fiesta y se animó a ponerle color al momento más emocionante y tenso de la Vendimia.
“Era un muchachito inquieto y tenía algo en mente: ser parte de la celebración, estar en el escenario. En el teatro griego, me las fui ingeniando para que me incluyeran. Comencé vistiéndome de paisano para acompañar a las reinas, fue mi iniciativa, de metido, imaginé esa escena y poco a poco la pude concretar, pero fui más allá”, confesó.
Cuándo fue el estreno de su primer esmoquin
La primera reina que acompañó Santiago fue a Lourdes Ruiz, de Las Heras, quien entregó el reinado a Noemí Sebastianelli, de Tunuyán, soberana vendimial en 1973.
“Fue una búsqueda personal y se fue dando naturalmente, yo quería poner mi impronta en la Vendimia y a los pocos años quise vestirme de esmoquin para darle más brillo a mi sueño”, explicó Buena Onda.
“Naturalmente, como se imaginarán, yo no tenía esmoquin. Fui a una casa de alquiler de trajes que estaba en General Paz y San Martín, me probé los más chiquitos. ¡Todos me quedaban grandes, enormes! El encargado me dijo que no había una prenda así para mí. ‘Sos muy bajito, muy delgadito’, me dijo. Yo insistí, lloré incluso, hasta que me modificaron un esmoquin para que me quedara. Esa fue la primera vez que subí al escenario del Frank Romero Day como se me conoce ahora, como el chambelán de las reinas, con un traje adecuado y brillante”, confesó.
La intriga de todos: Qué les dice Morales a las reinas
Todos los mendocinos nos hemos preguntado alguna vez qué les dice Buenas Ondas a las reinas cuando las conduce elegantemente por el escenario. Se nota que algo les comenta, que va combinando algunas palabras junto a su sonrisa. Es un tránsito de unos pocos pasos, que siempre nos queda en la memoria.
“Les digo a las reinas, mientras las acompaño, tomándoles la mano: camine derechita, erguida, sonría porque hay mucha gente que la está viendo y usted merece verse bien. Salude con la mano en alto pero sin taparse el rostro, acuérdese, usted es la reina”.
Las reinas inolvidables para el chambelán
Pero luego vinieron muchísimas vendimias, y Santiago estuvo en todas. De entre todas las elecciones de reina nacional, se detiene especialmente en el recuerdo de Viviana Lucero, quien fue electa con ciento veinte votos, la mayor cantidad de todos los escrutinios vendimiales, la más votada de la historia. “Fue en 1990 y aquel fue un momento espectacular, la enorme energía y la alegría que había sobre el escenario”.
“A principio de los años ochenta –recuerda–, en una Bendición de los Frutos, hubo un problema de movilidad y el cantor encargado de interpretar Virgen de la Carrodilla no llegó, entonces Elizabeth Martínez, la reina, pidió una guitarra y cantó la tradicional alabanza. Ese fue un momento espontáneo y muy emocionante, imborrable”.
Santiago se pone feliz cuando le pedimos que nombre alguna de las soberanas que lo marcaron en su vida de chambelán. Nos confiesa que recuerda con mucho cariño a reinas nacionales que tuvieron y tienen gran arraigo popular, como Cecilia Fornara, Marcela Gagua, Estela San Sebastián. También evoca el emocionante momento y la celebración del pueblo de Malargüe cuando se coronó reina nacional Patricia Cecconato, al igual que cuando fue elegida Lorena Lorca, del departamento de La Paz.
Cómo ve la Vendimia en veinte años
“Seguramente algunas cosas cambiarán, algunos atributos tal vez, pero lo esencial no cambiará, porque toda la celebración y cada una de las figuras que tienen que ver con Vendimia están muy arraigadas. Estoy seguro de que el pueblo de Mendoza defenderá esa tradición, eso no se puede perder”, sostuvo Santiago, una figura emblemática de nuestra Vendimia.
