Un intenso temporal de lluvia, viento y granizo que castigó ciudades y localidades del sur de la provincia de Jujuy provocó en la madrugada de este lunes el anegamiento de calles, la caída de postes de servicios y árboles de gran porte, voladuras de techos y un corte en el suministro de energía eléctrica que, en determinados sectores, se prolongó hasta cerca del mediodía. Si bien no hubo que lamentar víctimas, una vez pasada la contingencia, a la luz del día en algunos vecindarios surgieron disputas entre los propios damnificados por la propiedad de chapas que volaron por los aires, según testimonios que recogieron movileros de canales de televisión.
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A media mañana voceros de la Dirección de Emergencias de Jujuy hicieron una reseña del fenómeno y sus consecuencias, informando que las ráfagas de viento comenzaron a soplar cerca de la una de la madrugada, causando el colapso del servicio eléctrico, a la vez que se se descargaba una copiosa lluvia con granizo en la capital San Salvador y localidades de la zona de las regiones de los Valles y Yungas, lo que activó a los equipos de emergencias en la inmediata atención de contingencias que se sucedían de manera simultánea en varias zonas de la provincia.
“El evento climático requirió, a partir de la 1:30, la atención de las cuadrillas de emergencias por la caída de árboles en el espacio público, voladuras de techos y el ingreso de agua en diversos domicilios de la capital jujeña”, describió el director general de Emergencias, comisario general Francisco Guanuco.
Los equipos de asistencia trabajaron en la madrugada “en el desagote de viviendas en los barrios Cuyaya y Punta Diamante, Bicentenario -el punto más afectado, señaló Guanuco- y 150 Hectáreas y en la normalización del tránsito en la avenida Carrillo del barrio Ciudad de Nieva y la avenida 19 de Abril, debido a que habían caído árboles de gran porte en esas calles” de la capital.
Apuntó el funcionario al respecto que al menos ocho árboles fueron derribados por el viento en la vía pública, uno de los cuales cayó sobre una camioneta, provocando “solo daños materiales”. También el personal de la Secretaría de Seguridad tomó conocimiento de la voladura de techos en asentamientos y barrios próximos al centro: “Muy fuerte el viento en Jujuy. Una chapa de zinc cayó en mi patio”, relataba a la 1:50 un vecino de Chijra en sus redes sociales.
LA EMERGENCIA EN ALTO COMEDERO
Alertados acerca de los efectos de la tormenta eléctrica, los equipos de Seguridad acudieron al barrio Bicentenario y 150 Hectáreas, ambos de Alto Comedero, en la zona sur de la ciudad capital, donde “hubo varias viviendas afectadas por la entrada de agua, por lo que se produjo una autoevacuación hacia casas vecinas para resguardar a niños hasta que se logró desagotarlas”, describió Guanuco.
Vecinas de ambos sectores hablaron con diferentes medios relatando los angustiantes momentos que atravesaron sus familias cuando el viento arrancó techos de chapa y la tormenta arreció ,mojando pertenencias y mobiliario y dejando latente además el riesgo de electrocución, a lo que siguió la cerrada oscuridad que devino tras el corte del suministro eléctrico.
Las ráfagas de viento y lluvia también afectaron la zona de la ciudad El Carmen y sectores del departamento San Antonio como El Ceibal y El Tipal, donde se contabilizó “la caída de casi treinta árboles sobre los corredores provinciales por lo que equipos municipales trabajaban en la remoción de los mismos, principalmente sobre la ruta 42″, decía Guanuco poco antes del mediodía.
Por otra parte, el titular de Emergencias destacó el trabajo coordinado con áreas de la Policía de la Provincia, de los municipios e incluso dotaciones de bomberos voluntarios de Alto Comedero y de la ciudad de El Carmen.
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“En todas las contingencias que se conoció durante la madrugada solo hubo daños materiales, no se tuvo que atender heridos como tampoco hubo evacuaciones a otros lugares”, agregó, al tiempo que mencionó que “las rutas de la provincia están habilitadas”, aunque recomendó a los conductores que eviten transitar de noche por la zona de la Quebrada de Humahuaca porque “en poco tiempo se producen desmoronamientos y la crecida de arroyos que cruzan sobre ese corredor”.
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