El té azul, también conocido como té oolong, es una variedad de té que captó la atención de los entusiastas del té y los expertos en salud. A medio camino entre el té verde y el té negro, el té azul se destaca no solo por su sabor distintivo y su aroma floral, sino también por sus notables propiedades para la salud.
Cómo se obtiene el té azul
El té azul se obtiene a partir de las hojas parcialmente oxidantes de la planta Camellia sinensis. Estas hojas, originaria del sudeste asiático, fue empleada durante siglos en países como Tailandia, Vietnam, Bali y Malasia, no solo en la cocina, sino también para teñir telas y en la elaboración de productos cosméticos.
Cómo prepararlo
Ingredientes:
- 1 cucharada de flores secas de guisante mariposa
- 2 tazas de agua
- 1 cucharadita de zumo de limón
Preparación:
- Hervir el agua.
- Una vez que el agua esté hervida, retirarla del fuego y añadir las flores secas. Cubrir el recipiente con una tapa, ya que hervir las flores puede resultar en un sabor amargo.
- Colar el té en una taza y, si se desea endulzar, añadir una cucharadita de miel.
- Para cambiar el color del té, agregar unas gotas de limón.
Este té puede consumirse en cualquier momento del día, sin embargo, los expertos sugieren tomarlo después de las comidas para facilitar la digestión. Se recomienda una ingesta diaria de 2 a 3 tazas de té azul como una medida saludable.
Cuáles son sus beneficios
- Facilita la digestión: Se recomienda tomar una taza después de las comidas para notar los beneficios.
- Es un excelente desintoxicante: Consumirlo en ayunas un par de veces por semana puede ayudar a eliminar las toxinas del organismo.
- Mejora el estado de ánimo: Su contenido en minerales y vitaminas contribuye a reducir el estrés y la ansiedad.
- Combate la fatiga, fomenta las emociones positivas y aumenta la energía y la productividad.
- Beneficia la vista: Las antocianinas presentes en el té azul mejoran la circulación sanguínea en los capilares de los ojos, favoreciendo una mejor claridad visual.
- Estimula la memoria: La flor de guisante azul es reconocida como un potente nootrópico en diversos estudios científicos, ya que aumenta el nivel de acetilcolina, un neurotransmisor esencial para el funcionamiento óptimo del cerebro.
- Acelera la pérdida de peso: Su perfil nutricional lo convierte en una bebida ideal para quienes buscan perder peso.
- Ayuda en la diabetes: Beber una taza de té azul caliente diariamente puede prevenir picos de glucosa en sangre en personas con diabetes tipo 2, gracias a su contenido de ácido fenólico y antioxidantes que mejoran la secreción de insulina y regulan el metabolismo de la glucosa.
- Actúa como un paracetamol natural: En casos de fiebre, puede ayudar a reducir la temperatura corporal.
- Contribuye al bienestar del corazón: Consumir té azul ayuda a reducir los niveles dañinos de triglicéridos y colesterol LDL, mientras aumenta el colesterol HDL, lo que puede prevenir la aterosclerosis, los ataques cardíacos, los coágulos sanguíneos y la hipertensión.
- Es efectivo para tratar resfriados y tos: Gracias a sus propiedades antiinflamatorias, ayuda a reducir la irritación de los pulmones y a drenar el exceso de líquido. También puede tener efectos terapéuticos en el asma y diversas alergias respiratorias.
- Mejora la calidad de la piel: Su alta concentración de antioxidantes estimula la producción de colágeno y elastina, beneficiando la salud de la piel.
- Fortalece el cabello: Los bioflavonoides presentes en el té azul favorecen su crecimiento, lo espesan y mantienen su color natural. Además, se utiliza como colorante en champús para dar brillo al cabello teñido, atenuar el tono pelirrojo y resaltar los tonos blancos y grises.