Evalúan eliminar la repitencia del secundario: cuáles serán los cambios de cara a 2023

El año que viene se actualizará el régimen académico bonaerense. Directores de escuelas participan de la delineación de la reforma.

Desde 2023, habrá un nuevo regimen educativo en escuelas bonaerenses.
Desde 2023, habrá un nuevo regimen educativo en escuelas bonaerenses. Foto: Ramiro Pereyra

Habrá cambios en el régimen académico del nivel secundario de las escuelas bonaerenses. Entre las modificaciones que se realizarán desde el próximo año, se encuentra la posibilidad de que los alumnos y alumnas no repitan de curso.

Con el cierre de las escuelas a raíz de la pandemia, se tomaron medidas excepcionales, considerando las dificultades de estudiar a la distancia, y todos los alumnos promocionaron. El año pasado, los criterios se flexibilizaron y la provincia de Buenos Aires permitió pasar de año con hasta seis materias pendientes. Recién ahora, en 2022, se volvió a la normalidad. Sin embargo, esto podría cambiar el año que viene.

Se evalúa eiminar la repitencia en los secundarios.
Se evalúa eiminar la repitencia en los secundarios.

“El régimen académico es el instrumento que regula la organización institucional y varios aspectos centrales de la vida cotidiana de la escuela. Buscamos renovarlo no por una falla en sí, sino más bien para actualizar las formas de pensar la organización escolar y hacerla más cercana a las condiciones de época, recuperar el recorrido hecho por el sistema educativo bonaerense en los 15 años de obligatoriedad de la secundaria y el trabajo durante la pandemia que construyó un nuevo saber pedagógico del que debemos aprender”, explicó Gustavo Galli, director del Nivel Secundario de la provincia.

E n la provincia de Buenos Aires, solo en secundaria, funcionan 4 mil escuelas y estudian 1.7 millones de chicos. En las últimas semanas, funcionarios de la Dirección General de Cultura y Educación llevaron a cabo más de 200 encuentros con directores de toda la provincia a fin de delinear la reforma. Esta labor continuará durante los próximos meses, para poder comenzar en marzo con un nuevo régimen.

La reforma también tocará a la educación privada, y desde AIEPBA, la cámara que nuclea a la mayoría de estos colegios, le presentó un documento al ministerio en el que plantean sus inquietudes. “Estamos de acuerdo en que se discuta la repitencia [...]. La repitencia no sirve, pero no hacer nada para que el alumno aprenda tampoco sirve. Reclamemos al sistema educativo que tome las medidas adecuadas para que los chicos aprendan en serio”, subrayaba el texto firmado por Martín Zurita, titular de la cámara.

Como Zurita, muchos especialistas considera que la repitencia no mejora los aprendizajes y que incluso contribuye a que los chicos abandonen la escuela. También se cuestiona que por adeudar tres o más materias se deba hacer un mismo curso durante un año.

“Se analizan diversas alternativas, aunque no está definida aún la forma de promoción de las y los estudiantes”, deslizó Galli. Una de las opciones que gana terreno es la de “promoción ciclada”, lo cual implica dividir la secundaria en dos ciclos para articular contenidos: el ciclo básico, que iría de primer a tercer año y el ciclo superior, que iría de cuarto a sexto. De esta manera, sólo habría dos instancias de promoción a lo largo de la secundaria.

Acerca de si un sistema así podría generar la convivencia de saberes dispares, el funcionario dijo: “En cualquier caso debemos trabajar para que la propuesta del nuevo régimen implique una concepción de justicia educativa a la vez que más y mejores aprendizajes”.

La flexibilización de los sistemas durante la pandemia instalaron el debate en todo el país. En Santa Fe, por ejemplo, se propuso eliminar la posibilidad de que sus estudiantes repitan de año desde 2023 y pasar a un sistema de “avance continuo” que no esté atado a la acreditación de un número de materias.

Cuáles son los cambios que quedarán

Los cambios que se establecieron en 2021 seguirán vigentes cuando se oficialice el nuevo régimen el años que viene. Por un lado, la organización del ciclo lectivo en secundaria seguirá siendo en dos cuatrimestres en lugar de tres. Por otra parte, se mantendrá el denominado Registro Institucional de Trayectoria Educativa (RITE).

El RITE, que reemplaza al boletín, llegó para quedarse.
El RITE, que reemplaza al boletín, llegó para quedarse. Foto: Ignacio Blanco

El RITE reemplaza al tradicional boletín y se emite una vez finalizado cada cuatrimestre en escala conceptual. Tanto el primer como el segundo RITE cuentan con una valoración cualitativa que se expresa de acuerdo a tres categorías: Trayectoria Educativa Avanzada (TEA), que implica al menos el 70% de los contenidos aprobados, Trayectoria Educativa en Proceso (TEP) y Trayectoria Educativa Discontinua (TED).

Las materias se aprueban cuando el alumno logra TEA en los dos cuatrimestres. Es entonces cuando se pasa a calificarlo con una nota de entre 7 y 10. En caso de que no logre aprobar la asignatura, hay instancias de “intensificación de la enseñanza” durante diciembre de ese año y febrero-marzo del siguiente para acreditar el cuatrimestre que tiene pendiente o la materia completa en caso de no haber obtenido TEA en ninguno de los dos períodos.