La madre de Joaquín Sperani, el adolescente que encontraron muerto en Córdoba, un caso que sacudió a Laboulaye, culpó al compañero de escuela de su hijo que está detenido por el crimen. “Todo indica que fue él quien lo mató, es un psicópata basura”, afirmó.
En medio del dolor y la conmoción, Mariela Flores sentenció: “Hay muchas pruebas que lo incriminan. Era un amigo de toda la vida, no sé qué se le cruzó por la cabeza”. En diálogo con TN, añadió: “En este momento no tengo las fuerzas para hablar, pero en unos días voy a decir un montón de cosas”.
El cuerpo de la víctima, de apenas 14 años, fue encontrado en la tarde de este domingo en una casa abandonada ubicada a unos 100 metros de la escuela secundaria a la que concurría en la ciudad de Laboulaye. El adolescente era buscado desde la tarde del jueves 29, cuando no asistió al colegio Ipem Nº 278 “Malvinas Argentinas”.
EL ACUSADO POR LA MUERTE DE JOAQUÍN ES INIMPUTABLE
Un adolescente de apenas 13 años es el principal sospechoso por la muerte. Habría admitido a familiares y a las autoridades que es el autor. Joaquín habría recibido golpes en la cabeza con un hierro u otro objeto contundente, según trascendió de fuentes con acceso a la causa.
Por su edad, el chico de 13 años es absolutamente inimputable para la ley. Es decir, no puede ser sometido a un proceso penal ni mucho menos a una acusación. De todos modos el expediente será girado de la fiscalía inicial a un juzgado penal juvenil para que actúe, investigue y profundice cómo fue que sucedieron los hechos y por qué.
Respecto a la eventual participación de otra persona, fuentes con acceso a la causa indicaron que, en principio, no surgen elementos que hagan pensar sobre la complicidad de otras personas, menores o mayores de edad.
ASÍ FUE LA DESAPARICIÓN DE JOAQUÍN SPERANI
La última vez que habían visto con vida a Joaquín Sperani fue ese jueves, alrededor de las 15, con el uniforme puesto. La preceptora de su curso confirmó que no se encontraba en el aula cuando tomó asistencia. Un dato que sumó más confusión es que su bicicleta estaba en el patio de la escuela, aunque sus compañeros no pudieron dar certezas sobre si lo habían visto ese día.
Las horas pasaban y seguía sin aparecer, al mismo tiempo que tampoco se comunicaba con su madre, Mariela Flores. En medio de la desesperación, la mujer realizó una denuncia cuando ya era la noche del jueves.
El caso de Joaquín movilizó a toda la ciudad e inmediatamente sus familiares y amigos comenzaron una campaña por redes sociales para pedir por su aparición. Ayer sábado convocaron a una marcha, que terminó frente a la Jefatura de la Unidad Regional Departamental.
El joven fue encontrado sin vida en una casa abandonada. Al lugar acudieron bomberos, un servicio de emergencia, policías y la fiscalía de turno para retirar el cuerpo e iniciar las primeras investigaciones del caso y si se trató de un homicidio.
