En medio de la segunda ola de contagios de coronavirus, el ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, confirmó en su habitual conferencia de prensa que se observa una baja en los contagios en la Ciudad y que la curva de ocupación de camas de terapia intensiva “está empezando a seguir la curva de casos”.
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“Luego de estas tres semanas de mucha intensidad de casos, hemos tenido un número de casos significativamente más bajo”, señaló Quirós, quien agregó: “Después de haber tenido cerca de 2.800 casos promedio por día, hemos descendido al día de hoy a 2.200 casos promedio”.
Durante la conferencia de prensa, el ministro detalló: “Hemos descendido apenas un 20-25% de lo que hemos ascendido y necesitamos terminar de descender para darle más tiempo a las camas de terapia intensiva” y expresó que la curva de ocupación de camas de terapia intensiva “está empezando a seguir la curva de casos”.
Quirós instó a la gente a seguir con los cuidados y evitar los encuentros en lugares cerrados para continuar con la tendencia a la baja, sobre todo en momentos en que empieza a bajar la temperatura y mientras se espera la llegada de nuevas dosis.
“Si tenemos que encontrarnos con alguien con quien no convivimos, siempre en un lugar abierto. Y si tiene que ser en un lugar con techo, siempre debe haber ventanas y puertas abiertas por más frío que haga”, remarcó.
En este sentido, el funcionario porteño recordó que “los lugares cerrados son los principales lugares de contagio de esta epidemia en este momento”, y advirtió que “el lugar donde el barbijo tiene el mayor efecto, es en el lugar cerrado mal ventilado donde se rompe la distancia”.
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El ministro de Salud porteño puntualizó que la tasa de positividad en los testeos bajó “lenta pero sistemáticamente” en los últimos 10 días y está en 21,5%.
Cabe recordar que hace algunos días Quirós defendió las medidas para restringir “la nocturnidad y las reuniones sociales” y aseguró que si bien hay más jóvenes internados por coronavirus, esto no se traduce en un aumento de la letalidad entre estos grupos.
“Acompañamos con toda claridad las medidas que apuntan a la nocturnidad, a los encuentros sociales porque identificamos que allí estaba el problema”, admitió.
Para finalizar, el funcionario porteño expresó que la restricción de circulación a partir de las 20 horas es “un elemento muy colaborador para poner el foco para que la gente se vuelva a cuidar, sobre todo para que esas personas que no se estaban cuidando bien tengan cierta restricción”.
En ese sentido, instó a la población a evitar los encuentros “sociales, laborales o familiares” en ámbitos cerrados ya que “el frío tiende a llevarnos a lugares interiores y es donde ocurren la mayoría de los contagios”.
