El hallazgo del ARA San Juan puso fin a una etapa de incertidumbre y abrió paso a una nueva fase que tendrá dos ejes centrales: establecer qué ocurrió con el submarino y sus 44 tripulantes, y determinar responsabilidades en la plana mayor de la Armada.
Con respecto al segundo punto, la jueza federal de Caleta Olivia Marta Yáñez, que tramita el expediente de la tragedia, buscará determinar si hubo negligencia en el operativo de búsqueda de la nave.
El jefe de la base naval vicealmirante Luis López Mazzeo le indicó a la magistrada que en diciembre de 2017, Inglaterra ofreció un robot minisubmarino para investigar un objeto metálico detectado por el buque chileno Cabo de Hornos. Sin embargo, el ex jefe de la Armada almirante Marcelo Srur rechazó el ofrecimiento sin consultarle al ministro de Defensa, Oscar Aguad.
La jueza deberá resolver si se trató solo de una decisión errada de Srur o si cometió el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público. Según detalla Clarín, López Mazzeo también declaró que tradujo, leyó y entregó a Srur y Aguad un informe de la Armada de Estados Unidos que remarcaba que había existido una implosión y no había sobrevivientes. Srur rechazó esta versión.
La magistrada Yañez recabará todo el material fotográfico y fílmico que haya recolectado la empresa Ocean Infinity. Luego llamará a un equipo de peritos que buscarán develar las causas de la implosión del ARA San Juan.
Además, Yañez pedirá un estudio de factibilidad técnica y económica para evaluar si es viable reflotar el submarino. En caso de que no se pudiera reflotar, se podrían intentar alternativas para avanzar en un análisis minucioso del ARA: realizar un estudio metalográfico con rayos laser y e incluso ingresar a la nave con un robot.
