Desde el viernes pasado, cuando el presidente Alberto Fernández decretó cuarentena obligatoria en todo el país, más de 1200 personas fueron detenidas y 20.000 demoradas por incumplir con el aislamiento.
En los controles que se realizan habitualmente a automóviles y peatones, para determinar si están autorizados a circular por la vía pública, se escucharon los justificativos más insólitos para la violación de la cuarentena.
Un hombre que circulaba por la Panamericana en una camioneta utilitaria les dijo a las autoridades que "no tenía idea" que estaba prohibido salir del domicilio.
En otro caso, un plomero que fue detenido explicó que estaba yendo de urgencia a ver a una clienta porque "se le estaba inundando la casa". Mientras que otro, detenido en la avenida 9 de Julio, llevaba dos tablas de surf en el auto, pero dijo que estaba yendo a Mar del Plata a cuidar a su madre. Sin embargo, no pudo dar una dirección de la señora en esa ciudad.
Otro hombre que también llevaba tablas de surf llamó la atención el fin de semana largo. Cuando fue detenido admitió que venía de Brasil -país de riesgo-, pero que no se había tomado la temperatura. El joven fue escoltado hasta su casa por los efectivos, pero luego volvió a salir, por lo que tiene pedido de captura.
Un vecino de Boedo admitió que había salido a pasear porque "estaba aburrido del encierro", y en Recoleta un hombre dijo que tuvo que salir a hacer ejercicio porque había detectado que "tenía la glucosa alta" y necesitaba bajarla con actividad física.
Una pareja fue captada metiéndose al río de la Plata, en la costanera de Quilmes. "Vinimos a refrescarnos un ratito ya nos vamos", le dijeron a quienes vigilaban que se respete la cuarentena.
Además, el martes en San Telmo, un joven ciudadano chino fue detenido por circular por la calle jugando Pokemon Go.
Finalmente, otro hombre que fue interceptado por la policía cuando circulaba en su auto por el barrio porteño de Constitución afirmó que "estaba buscando travestis para satisfacer su deseo sexual".
