Coronavirus en Santa Fe: el impacto de la cuarta ola “todavía no se ve”

Autoridades provinciales recomiendan mantener el uso de barbijo y destacan que la vacuna aporta “muchas más defensas”.

El secretario de Salud, Jorge Prieto, dijo que es "fundamental seguir cuidándose" durante el otoño y el invierno.
El secretario de Salud, Jorge Prieto, dijo que es "fundamental seguir cuidándose" durante el otoño y el invierno. Foto: Gobierno de Santa Fe

A partir del anuncio de una cuarta ola de casos de coronavirus en Argentina, el secretario de Salud, Jorge Prieto, admitió este martes que esa aceleración de contagios “todavía no se ve” en Santa Fe. Al margen de que la curva se aceleró menos que a nivel nacional, insistió en la necesidad de usar el barbijo y completar los esquemas de vacunación.

Dado que no hay datos para predecir el comportamiento de la variante Ómicron entre el otoño y el invierno, el funcionario planteó que es “fundamental seguir cuidándose” con las medidas para prevenir el COVID-19. Con respecto a lo ocurrido hasta ahora, ponderó que es muy bajo el registro de “hospitalizaciones y formas severas” de la enfermedad.

Durante una conferencia de prensa en la ciudad capital, Prieto apuntó que la inoculación y el uso de barbijo son clave para atravesar los meses más fríos del año. “Esto nos va a permitir algo totalmente diferente a la tercera ola”, vaticinó.

El representante del Ministerio de Salud de Santa Fe recordó que actualmente el 94 % de la población recibió una inyección contra el coronavirus. El 87 por ciento cuenta con esquema completo y casi dos tercios de los habitantes ya accedieron al refuerzo.

El funcionario provincial planteó que las dosis para extender la protección contra el COVID-19 otorgan una inmunidad mayor que la que queda después del contagio. Al mismo tiempo, descartó retomar el uso obligatorio de barbijo. “No habrá medidas extremas”, sentenció.

Por otra parte, Prieto anticipó que harán un “monitoreo territorial para ver cómo está circulando” la variante Ómicron. Respecto de la iniciativa, argumentó que actualmente el coronavirus es parte de una “superposición” de enfermedades con procesos respiratorios y no se puede “diferenciar” para evaluar su impacto sanitario.