La cercanía del invierno ya comenzó a sentirse en Salta y el Ministerio de Salud Pública de la provincia emitió una recomendaciones para evitar la intoxicación por inhalación de monóxido de carbono. Al mismo tiempo recomiendan hacer limpiar y revisar los artefactos de calefacción por técnicos matriculados antes de ponerlos en funcionamiento.
El monóxido de carbono es una sustancia gaseosa, imperceptible, pero muy peligrosa, ya que puede provocar enfermedad y hasta pérdida de la vida.
Con la llegada del período de bajas temperaturas, las familias recurren a distintos medios para calefaccionar el ambiente, como artefactos a gas, carbón u otro combustible que, si no están en buenas condiciones de funcionamiento o se los usa de manera inadecuada, representan un serio riesgo.
Ambientes ventilados
Las muertes por intoxicación con monóxido de carbono son prevenibles y evitables. Gran parte de los casos ocurren por mal uso de braseros o funcionamiento deficiente de artefactos a gas en ambientes mal ventilados. La sustancia se origina en artefactos que queman gas, carbón, leña, querosén, alcohol u otro combustible, en ambientes sin suficiente oxígeno.
Es un gas que no tiene olor ni color, se encuentra en el humo de la combustión que producen braseros, estufas a gas y otros sistemas de calefacción, velas, vehículos con motor encendido, etc... Por eso es importante no mantener los ambientes completamente cerrados, para evitar la acumulación del gas.
Prevención
- Encargar el mantenimiento de los artefactos a gas a técnicos matriculados, ya que esta tarea requiere de conocimientos específicos.
- No se debe utilizar hornallas u hornos de cocina para calentar los ambientes.
- En el caso de que se utilice brasero, se lo debe encender fuera de la casa y no se lo debe entrar hasta que el carbón esté completamente prendido, manteniendo una ventana abierta para permitir la circulación de aire. Es muy importante no dejarlo en el interior, sobre todo cuando las personas se retiran a dormir.
- Nunca se debe dormir con velas o braseros encendidos, ya que al riesgo de intoxicación por monóxido de carbono se suma la posibilidad de incendio.
- Tampoco se debe instalar el calefón en el interior del baño. La salida al exterior de calefones y calefactores debe ser controlada periódicamente por gasistas matriculados.
- La llama de los quemadores de horno y hornallas debe ser siempre azul; si presenta color amarillo o anaranjado, es por la presencia de monóxido de carbono. En ese caso, se debe revisar los artefactos de inmediato.
- Revisar chimeneas, ya que algunas aves pueden construir su nido en ellas y obstruir la salida de los gases.
- No encender el motor de vehículos en lugares cerrados, ya que el humo del caño de escape produce alta concentración de monóxido de carbono.
Síntomas de la intoxicación por monóxido de carbono
- Dolor de cabeza
- Mareos
- Debilidad
- Náuseas
- Vómitos
- Dolor en el pecho
- Confusión
- Pérdida del conocimiento
Las personas dormidas pueden morir sin poder reaccionar. Ante la sospecha de intoxicación, se debe retirar de inmediato a la persona del ambiente contaminado, ventilar el lugar y solicitar ayuda al Sistema de Emergencias 911.