A través de una carta, el intendente de Tandil y presidente de Mercociudades, Miguel Ángel Lunghi, pidió la liberalización temporal de la patentes de la vacunas contra el coronavirus a la Organización Mundial del Comercio (OMC), en el marco de un contexto regional que golpea a ciudades de toda la región.
La importancia del pedido radica en que la OMC es el único organismo a escala mundial que puede restringir el uso de los derechos de propiedad sobre las vacunas. Los países que la componen se reunirán a inicios de junio para decidir si apoyan la medida y su aprobación dependerá del consenso mundial de los 164 países que la integran, por lo que para lograrlo deberán votar a su favor.
En su pedido, el jefe comunal reconoció que para combatir la pandemia generaron “estrategias regionales” y criticó la postura del Gobierno Nacional: “Muchas veces enfrentamos políticas nacionales que minimizaban el impacto de la pandemia”.
A su vez, Miguel Ángel Lunghi dio detalles de la situación en la que se encuentra América Latina, que según detalla, ha sido una de las áreas más afectadas por la pandemia, y también fue una de la regiones que menos dosis de vacunas recibió. “Tenemos una crisis económica que destruyó miles de puestos de trabajo, que impactó drásticamente en el ingreso de las personas y el acceso a bienes de primera necesidad como la alimentación”
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En este contexto, la carta dirigida a la Organización Mundial del Comercio, se suma al pedido inicial de India y Sudáfrica, avalado en la actualidad por más de medio centenar de países, de suspender temporalmente los derechos de propiedad intelectual de las vacunas contra el COVID-19, para favorecer la fabricación a escala mundial de este antígeno que podría salvar millones de vidas.
También se solicita favorecer el acceso a productos médicos asequibles para su tratamiento, y así “intensificar las actividades de investigación, desarrollo, fabricación y suministro de productos médicos esenciales”, enfatizó el jefe comunal.
La carta concluye con un llamado a la solidaridad mundial “por la vida, por la salud, porque momentos excepcionales como este solo pueden superarse a través del diálogo, la cooperación y la solidaridad internacional. La OMC puede y debe tomar ese camino”.
Otra herramienta mundial para el acceso a las vacunas es el dispositivo COVAX, un esfuerzo global presidido por la OMS con la expectativa de alcanzar al 20% de la población de los países que lo integran. Sin embargo, el proceso ha sido más lento de lo esperado y muchos de los países en vías de desarrollo que necesitan dosis con urgencias, aún no han recibido vacunas a la fecha.
