Una joven puntana perdió a su pareja luego de que muriera en el pasillo de un hospital por Covid-19

Kevin Ocampo falleció hace menos de una semana en el ingreso de un hospital de San Luis por falta de oxígeno. Su pareja relata la estremecedora historia.

Terapia intensiva por Covid-19.
Terapia intensiva por Covid-19. Foto: Ignacio Blanco

Luego de contagiarse de Covid-19 Kevin Ocampo comenzó a sentir síntomas relacionados con el virus. Comenzó a sentir que le faltaba oxígeno para respirar y decidió ir al hospital más cercano. Falleció luego de llegar al establecimiento.

//Mira también Dólar blue hoy en San Luis: cuánto cuesta la moneda luego de las restricciones cambiarias

Oriundo de la ciudad de La Punta el joven padre de dos niños falleció en el pasillo de un hospital. Kevin era verdulero en un local del centro comercial y tenía 27 años.

En un principio el joven pensó que había contraído laringitis que había tenido su hijo hacían algunas semanas. Al día siguiente su estado de salud empeoró y decidió irse a hisopar. El resultado del test rápido fue negativo.

Los profesionales del hospital le realizaron otros estudios y lo medicaron para disminuir los síntomas.

“El lunes por la tarde no le bajaba la fiebre con nada, me preocupe, le dije que se vaya a ver de nuevo y me dijo que no que iba a esperar el resultado del hisopado”, contó Yasmin Suarez pareja de Ocampo.

“Transpiraba mucho, se cambiaba la ropa, se bañaba varias veces. Le pregunté si estaba bien, sentía que la garganta estaba cada vez más hinchada, que había intentado tomar el paracetamol no pudo tragar la pastilla”, añadió.

//Mira también Búsqueda Guadalupe: incorporarán un georradar para encontrar a la pequeña

El martes se volvió a dirigir al nosocomio y una vez más lo medicaron para disminuir la fiebre y le volvieron a realizar estudios. “Le dieron un certificado de trabajo en el que decía que estaba cursando laringitis, que tenía que esperar el resultado y que debía permanecer aislado porque era positivo en coronavirus”, precisó la joven.

Para esa tarde el joven no podía ingerir líquidos y la familia comenzó a desesperarse. “Todo el tiempo iba al baño, se bañaba para tratar de bajar la fiebre”, dijo la mujer.

Suarez informó que llamaron a emergencias, pero no enviaron ambulancias para atender al joven.

Unidad de traslado.
Unidad de traslado. Foto: Castillo Pedro

La enorme dificultad para respirar hizo que el Ocampo llamará a un taxi para ir al hospital una vez más. “Me dijo que le dolía mucho la garganta, que no podía tragar, que tenía ganas de morirse porque no quería sentirse más así, asfixiado”, relató Suárez.

El chofer del taxi le contó a la mujer que tuvo que ayudarlo a bajarse del móvil porque se estaba desmayando y que lo hicieron esperar alrededor de cinco minutos en una silla que estaba en la entrada del Hospital.

“Cuando le abrieron la puerta se desvaneció en el pasillo y ahí le agarró cardiorrespiratorio, intentaron reanimarlo pero ya era tarde, no había solución”, expuso.

“Preparé a mis dos niños y cuando llegué ocho médicos me informaron que mi pareja había muerto. Ellos me dijeron que él llegó desesperado, que lo ayudaron, le pusieron el suero y que le colocaron oxígeno, pero le dio un paro”, lamentó la mujer en medio de un angustiante llanto.

La mujer cursa un embarazo de 19 semanas: “Mis hijos todos los días me preguntan por él, sobre todo cuándo va a volver”, sostuvo.