Murió el empresario Carlos Cassab, recientemente sentenciado por delitos sexuales

El propietario de “Dismar Caucete” falleció a sus 74 años, ocho días después de conocer el dictamen judicial que le otorgó 10 años de prisión.

Ocho días después de ser condenado a 10 años, murió el empresario Carlos Cassab
Ocho días después de ser condenado a 10 años, murió el empresario Carlos Cassab

Ocho días después de ser condenado a diez años de cárcel por haber pagado por los servicios sexuales de una niña de 14 años, el empresario Carlos Cassab murió. Esta noticia fue confirmada el último lunes por fuentes judiciales que, además, detallaron que días después de su sentencia, el propietario de “Dismar Caucete” fue operado por un cáncer de colon.

Luego de ser intervenido quirúrgicamente, a Cassab le surgió una nueva complicación en su organismo y finalmente perdió la vida a sus 74 años, mientras permanecía internado. El mismo día de su condena, el empresario le había expresado al tribunal que iba a “desistir de la operación (realizada finalmente el pasado 22 de diciembre) pese a que mi hija quiere que me opere, pero no me puedo someter en estas condiciones. Yo respeto a los policías y me han tratado bien, pero es incómodo tener a un uniformado al lado de mi cama con un handy o radio sonando todo el tiempo”.

Además, agregó: “Cuando estuve en el Hospital Marcial Quiroga tuve un trato de lo más discriminatorio, porque a los otros pacientes les daban la comida en una bandeja y a mí me tiraban una bolsita... además, la sociedad nos ve mal a los presos. Yo tengo 74 años, una conducta intachable, le doy trabajo a la gente y pago una fortuna en impuestos, pero en este estado no me puedo operar”.

El domingo 21 de marzo de este 2021, tanto Cassab como el dirigente social Roberto “Fido” Galván, quedaron apuntados por ser partícipes de un escándalo sexual que tenía como víctima a una adolescente de 14 años. Según se sospechó en ese momento y se pudo confirmar más tarde, la niña era ofrecida en el comercio ilegal de la prostitución por su propia tía de 33 años.

Tras nueve meses de investigación, el tribunal pudo acreditar que sí existieron pagos para tener sexo con la menor y por eso condenaron a los tres imputados. Así, le aplicaron 14 años de cárcel a la tía de la chica por promover y facilitar su prostitución, por la explotación económica de esas maniobras y por haber intentado meter en ese mundo a una amiga íntima de su sobrina, otra menor. Tanto a Galván como a Cassab le dieron la pena de 10 años de prisión, aunque el fallo no está firme y sus fundamentos se conocerán el próximo 9 de febrero.