Pagan más de un millón de dólares por una botella de whisky

Un empresario fanático de esta bebida desembolsó una suma millonaria por un Macallan Valerio Adami, destilado en 1926.

Un millonario pagó 1.101.687 dólares por una botella de Macallan Valerio Adami
Un millonario pagó 1.101.687 dólares por una botella de Macallan Valerio Adami

Cuando sobra el dinero los caprichos están permitidos. Por eso, un millonario fanático del whisky se permitió desembolsar 1.101.687 dólares por una botella de Macallan Valerio Adami, destilado en 1926 y embotellado en 1986.

La compra se dio en el marco de una subasta, y convirtió a esta botella en la más cara de la historia, superando el récord que tenía hasta ahora una botella del mismo whisky vendida por 1,01 millones de dólares en mayo en Hong Kong.

"El comprador procede de Extremo Oriente donde hay un enorme interés por el whisky", reveló Richard Harvey, experto en bebidas de la casa de subastas Bonhams. Y contó que en esa zona están abriendo muchos bares de whisky y que el 40% de sus ventas provienen de compradores que viven allí.

Un millonario pagó 1.101.687 dólares por una botella de Macallan Valerio Adami
Un millonario pagó 1.101.687 dólares por una botella de Macallan Valerio Adami

El costoso licor fue destilado en 1926 y conservado en una barrica hasta su embotellado 60 años después, en 1986. Solo se produjeron 24 botellas, y sus etiquetas cuentan con ilustraciones de dos célebres artistas pop: 12 del británico Peter Blake y 12 del italiano Valerio Adami.

No se sabe cuántas de esas botellas aún se conservan, pero se sabe que una de ellas fue destruida durante un terremoto en Japón en 2011 y otra habría sido bebida.

La botella vendida el miércoles había sido comprada por la destilería Macallan por una cantidad no divulgada en 1994 y formaba parte de una colección mayor del mismo propietario puesta a subasta.

Charles MacLean, experto en whisky escocés, explicó a la agencia de noticias AFP que "el whisky es la tercera inversión alternativa más popular en período de incertidumbre bursátil, por detrás de los autos de colección y de las obras de arte".