En medio de los preparativos para el clásico rosarino, este martes se reunieron los presidentes de Rosario Central y Newell’s. Con el banderazo del jueves confirmado en el Coloso del Parque de la Independencia, el encuentro organizado por el Concejo Municipal apunta a que el partido del domingo se desarrolle sin problemas dentro o fuera de la cancha.
Como titular del club anfitrión, Rodolfo Di Pollina reconoció que el duelo futbolístico es “importantísimo” para ambos equipos. No obstante, remarcó: “Queremos que esto sea una fiesta en paz”.
Tanto el presidente canalla como su par rojinegro Ignacio Astore coincidieron en el deseo de la vuelta del público visitante al clásico rosarino. “Eso se va a poder lograr con el correr del tiempo”, consideró la máxima autoridad de la Lepra.
El presidente de Newell’s dijo que el pedido para autorizar el ingreso de sus hinchas al Gigante de Arroyito no fue una “chicana”. Al respecto, recordó que solicitaron lo mismo ante Talleres de Córdoba y Sarmiento de Junín con resultados opuestos.
Di Pollina explicó que Rosario Central decidió “priorizar el derecho del socio” en el marco del proceso de reserva y venta de entradas. De parte del Gobierno provincial tampoco hubo apoyo para organizar el clásico con simpatizantes de ambos equipos.
Rosario Central y Newell’s retoman el plan del clásico rosarino amistoso
“Nos acostumbramos a jugar sin visitantes y eso es un error. El público tiene que volver, pero depende de muchos factores”, comentó Astore. A continuación precisó que la negativa formal para este partido obedece a la falta de “condiciones de seguridad” para el encuentro por la Copa de la Liga Profesional 2022.
Aunque todavía quedan por delante las elecciones en Arroyito, Di Pollina dejó la puerta abierta para organizar un clásico rosarino amistoso “a fin de año”. El presidente de Central sostuvo que es “una posibilidad” para poder disfrutar del duelo entre leprosos y canallas con hinchas de ambos lados en la misma cancha.
