Condenaron a 11 años de prisión y detuvieron a un sacerdote acusado por abuso en Tierra del Fuego

El sacerdote de la ciudad de Río Grande Cristian Vázquez fue condenado hoy a 11 años de prisión por el abuso sexual de una adolescente de 13 años, en el primer juicio oral de Tierra del Fuego a un religioso por este tipo de delito

sacerdote Cristian Vázquez
sacerdote Cristian Vázquez

El Tribunal de Juicio en lo Criminal de Río Grande ordenó, además, la inmediata detención del religioso que había llegado en libertad a su juzgamiento y que estaba a cargo de la parroquia Virgen del Carmen cuando se relacionó con la menor de edad en 2013.

El veredicto de los jueces Ernesto Borrone, Juan José Varela y Eduardo López halló a Vázquez autor material y penalmente responsable de los delitos de abuso sexual simple (dos hechos) y abuso sexual con acceso carna? (un hecho) en todos los casos agravado por su condición de religioso.

Según se ventiló en la causa, la víctima frecuentaba asiduamente la iglesia junto a su familia y realizaba tareas como monaguillo, además de que todo el grupo familiar formaba parte del círculo íntimo del cura porque tanto la joven como su hermana limpiaban el departamento del religioso y a cambio recibían un salario e incluso celebraron juntos una Navidad, indicó el requerimiento fiscal de elevación a juicio.

sacerdote Cristian Vázquez
sacerdote Cristian Vázquez

En ese contexto, el sacerdote aprovechó las circunstancias para acercarse a la joven y abusar de ella en tres oportunidades: dentro de un automóvil, en la casa de la adolescente y en su domicilio, siendo este último el más grave porque incluyó el acceso carnal, explicó el abogado querellante, Francisco Ibarra.

De acuerdo a la acusación de la fiscal Laura Urquiza, en dos ocasiones el sacerdote tocó a la menor en sus partes íntimas, aprovechándose de la inmadurez sexual de la víctima y sin su consentimiento y, en el otro caso, indicó que concretó el abuso con acceso carnal, valiéndose de amenazas y violencia física.

Los hechos fueron denunciados por la madre de la víctima en 2016, cuando su hija (que en la actualidad tiene 18 años) pudo contar por primera vez lo que le había sucedido.

Durante el juicio, los jueces decidieron no volver a convocar a la joven para no revictimizarla y luego de someterla a una pericia psicológica resolvieron reproducir su declaración prestada en la etapa de instrucción, y filmada en Cámara Gesell.

Vázquez siempre se proclamó inocente y negó los abusos tanto en su indagatoria como hoy, en oportunidad de prestar las últimas palabras antes del veredicto.

El sacerdote, separado del cargo desde poco después de la denuncia por el obispado de Río Gallegos, en Santa Cruz, a raíz de un proceso de la justicia canónica, llegó al juicio en libertad.

Sin embargo, el tribunal aceptó hoy una solicitud de detención planteada por la querella, basada en que el acusado no tiene arraigo en Río Grande, ni domicilio fijo, ni trabajo, ni familiares, lo que en virtud de la pena conlleva un riesgo procesal y un riesgo para la víctima, explicó a Télam el abogado querellante, quien dijo estar conforme con la sentencia.

Además de este caso que llegó a juicio, otro sacerdote que desarrollaba su ministerio en la ciudad de Río Gallegos, Daniel Omar Acevedo, fue separado del cargo a raíz de la denuncia por presunto abuso sexual que formalizó en Ushuaia un joven de 23 años, el 13 de noviembre de 2016.

El denunciante se presentó en la Comisaría de Minoridad y Familia de la capital fueguina y expuso que cuando tenía 15 años, el sacerdote acudió a unas vacaciones a su casa natal en la ciudad de Resistencia, Chaco, e intentó abusar de él.

Dijo que dos años después, cuando tenía 17 años, se repitió un hecho similar en el mismo sitio, y que al año siguiente el joven se mudó a Ushuaia donde volvió a ser contactado por Acevedo y se habría producido un tercer intento de abuso.