Juan Carlos Rubiolo trabajó durante 50 años en la fábrica de pastas La Italiana, de la ciudad de Río Cuarto. Ahora, a sus 64 años decidió jubilarse y sus jefes le regalaron un auto, como reconocimiento de su esfuerzo y dedicación.
Entró a la fábrica con sólo 14 años y fue uno de los primeros trabajadores de la firma. “Empecé con la empresa constructora, a levantar la pared, los cimientos. Estuve desde el comienzo con el señor Humberto Gualtieri, que lamentablemente no está más, él me trajo acá”, recordó Juan Carlos en comunicación con La Mañana del Limón.
Rubiolo vive en Las Higueras, localidad cercana a Río Cuarto, y viajó durante 50 años a realizar sus tareas en la fábrica. Por eso, los actuales dueños de la firma decidieron recompensarlo con un auto. “Estoy muy feliz, para mí es como una familia del corazón”, compartió el jubilado.
Además del auto, los dueños de La Italiana le pusieron Juan Carlos Rubiolo a un área de la empresa. “A esto nunca he pensado llegar. Me han apoyado en las malas como en las buenas, hemos pasado juntos los mismos problemas. Tanto así como ahora está el progreso, hemos tenido momentos difíciles”, relató.
Y cerró diciendo: “Es muy difícil decirlo, no sé si me lo merezco o no, pero ellos han tomado esta decisión. Yo he vivido dentro de la empresa, he trabado noche y día en la empresa, si había que venir, venía. Un poco la siento mía, me cuesta irme”.
