Le dan a una sola firma la mayoría de las rutas terrestres de pasajeros Posadas - Buenos Aires

A través de una subsidiaria, Vía Bariloche capturó 11 de esas 21 frecuencias. Más irritación causó que le otorguen a otra firma controlada, 10 de los 14 servicios semanales a Puerto Iguazú.

Vía Bariloche con visita de Mauricio Macri cuando era presidente, junto al ministro Guillermo Dietrich.
Vía Bariloche con visita de Mauricio Macri cuando era presidente, junto al ministro Guillermo Dietrich.

El retorno del transporte de larga distancia a Misiones tendrá un claro ganador: el grupo Vía Bariloche. La empresa operará a través de una de sus subsidiarias, Tigre Iguazú, 11 de las 21 frecuencias autorizadas por el ministerio de Transporte de Nación, más que todas las empresas misioneras juntas.

Sus estrechas relaciones con el poder, especialmente durante la gestión de Mauricio Macri, no han mermado con el nuevo gobierno. Las empresas de transporte de larga distancia finalmente podrán volver a trabajar. Junto al turismo, es uno de los sectores que viene sufriendo con mayor crudeza los efectos del coronavirus. Pero en una primera etapa, de duración indefinida, solamente se habilitará una parte de los servicios que se prestaban antes de la pandemia.

Para este regreso parcial de los ómnibus, el Ministerio de Transporte de la Nación fue el encargado de repartir entre todas las empresas, las pocas frecuencias que estarán disponibles. Después de varios borradores que sufrieron correcciones, circula la versión final del cronograma de servicios. Llegó con la confirmación de un rumor que ya venía circulando desde hace algunos meses en el sector: la empresa que era la favorita del macrismo, también goza de una relación fluida con el actual Gobierno nacional.

Se trata del grupo Vía Bariloche, que a través de una de sus subsidiarias, la empresa Tigre Iguazú, se quedó con la mayoría de las frecuencias que llegan a Misiones en que no respeta la proporción entre servicios autorizados que tiene cada empresa, ni algún otro criterio lógico.

Del total de 21 frecuencias semanales autorizadas con destino a Misiones, Tigre Iguazú se quedó con 11, Expreso Singer con 4, Rio Uruguay con 3, Crucero del Norte 2. Y –otro dato llamativo- a la empresa Tramat, que no tiene ningún servicio regular desde Misiones, le adjudicaron 1 servicio.

El retorno del transporte de larga distancia a Misiones tendrá un claro ganador: el grupo Vía Bariloche. La empresa operará a través de una de sus subsidiarias, Tigre Iguazú, 11 de las 21 frecuencias autorizadas por el ministerio de Transporte de Nación, más que todas las empresas misioneras juntas.

Pero si el foco se pone solo en el destino Puerto Iguazú, el más rentable en Misiones, Tigre Iguazú se quedó con 10 de los 14 servicios semanales autorizados, lo que convierte a la ruta en un virtual monopolio para esa empresa.

El reparto perjudica a las empresas misioneras que prestan servicios de larga distancias, algunas de las cuales están entre las más importantes del país teniendo en cuenta el tamaño de su flota y la cantidad de personas que emplean. El esquema de frecuencias determinado por Transporte de Nación representa un serio riesgo para esas fuentes de trabajo.

Satirizada en el mundo del transporte de pasajeros como "la Flybondi de los colectivos" el grupo Vía Bariloche consiguió múltiples favores del gobierno de Mauricio Macri. El presidente dejó evidencia de su buena relación con la empresa de la familia Trappa en sus visitas a las instalaciones que esa compañía tiene en Bariloche y en Buenos Aires y en las reuniones con los empresarios en Casa Rosada.

Por resolución del ministerio de Transporte a cargo entonces de Guillermo Dietrich, Vía Bariloche se quedó con líneas en Buenos Aires que eran de la empresa Rio Paraná. También hizo negocios con la Ciudad de Buenos Aires, a la que proveyó de colectivos eléctricos importados.

Durante el macrismo, Vía Bariloche consiguió montar una aerolínea, Servicios Aéreos Patagónicos Sociedad Anónima (SAPSA), que se hizo con 40 rutas aéreas incluso antes de tener una flota de aviones y logró que el Gobierno nacional le cediera sin cargo la base aérea Mariano Moreno que incluye un terreno de tres millones de metros cuadrados.

Pero no todo es transporte en la vida de la familia Trappa, también son los concesionarios del Cerro Catedral, uno de los centros de ski más importantes de Sudamérica. En 2018, ocho años antes de que venciera la concesión que tenía, el grupo empresario consiguió una extensión de contrato por 36 años, sin que mediara licitación, en un episodio que generó una acalorada polémica en Bariloche.

El desarrollo al que aspira el grupo Vía Bariloche en el Cerro Catedral permitirá que un amigo de toda la vida del expresidente Macri, Nicolás Caputo, iniciar un desarrollo urbanístico en el Cerro San Martín, lindero al Catedral, proyecto que está paralizado por la ausencia de infraestructura básica en el lugar, infraestructura que ahora podrá llegar gracias a las obras que se comprometió a llevar adelante la empresa de la familia Trappa.