La proscripción de Cristina, una narrativa para unir al Frente de Todos y apuntalar la carrera hacia el 2023

En el oficialismo confían que el mensaje de la Vicepresidenta servirá para apuntalar una propuesta electoral. Las conjeturas en torno al renovado operativo clamor y las críticas de JpC.

Cristina Kirchner (Archivo)
Cristina Kirchner (Archivo) Foto: Prensa CFK

“Soy peruca, hablemos clarito. El único renunciamiento que tuvo el peronismo fue el de Eva y acá tampoco hay autoexclusión, hay proscripción”. Esa frase que lanzó Cristina Kirchner para explicar por qué, por ahora, descuenta su participación en la contienda presidencial de 2023 forma parte de una narrativa que el Frente de Todos (FdT) usará para renovar sus pactos internos y a la que apelará la militancia kirchnerista para evitar el desánimo y ofrecer una consigna superadora a las múltiples contradicciones que impone la coyuntura económica.

Con el mensaje, Cristina Kirchner apeló a la memoria emotiva del peronismo y le dejó abierto el camino al operativo clamor que sus laderos iniciaron para tenerla como candidata. “No es la primera vez que proscriben a un dirigente del vuelo como el que tiene Cristina Kirchner o más. Ya ha pasado en la historia y el pueblo argentino rompe esas proscripciones, así que nosotros vamos a trabajar para romper esas proscripciones”, resumió Mario Secco, intendente del partido bonaerense de Ensenada que integra la mesa chica del autodenominado “kirchnerismo duro”.

El acto que encabezó la ex presidenta el martes en Avellaneda coincidió con gestiones relevantes para definir las reglas de juego del armado electoral del FdT, como las que llevaron adelante los referentes de la CGT con intendentes intendentes de la primera y la tercera sección electoral de la provincia de Buenos Aires.

Los líderes cegetistas Héctor Daer (quien ofició de anfitrión) y Carlos Acuña, y otros referentes sindicales, hablaron con los mandatarios comunales identificados con Cristina Kirchner sobre la unidad del FdT y el camino para ampliar la proyección.

Algunos de los intendentes presentes fueron el de Avellaneda, Jorge Ferraresi (quien luego recibió a la Vicepresidenta en su distrito); el de La Matanza, Fernando Espinoza, y el de Berazategui, el histórico referente peronista Juan José Mussi.

Según reconstruyó este medio, durante el cónclave también se comenzó a evaluar el mecanismo para resolver candidaturas, cuestión clave ante las demandas del gremialismo para sumarse en las listas, pero también para tratar de minimizar los efectos vinculados con el paso al costado de la titular del Senado. Es que, tal como reconocen en el kirchnerismo, el drama es que “Cristina no transfiere los votos”.

“Todo el mundo tiene derecho. Si quiere ser candidato, que lo exprese y si está dentro del FdT, la CGT va a apoyar”, aseguró Acuña en declaraciones radiales que realizó luego del encuentro.

En el oficialismo reconocen que el acto que encabezó Cristina Kirchner, el primero después de la condena que recibió en la causa Vialidad, tuvo otra razón de ser: “Su reaparición tiene que ver con motivar a los militantes de base y hacerles sentir que hay un 2023″.

Sembrar expectativas será clave para apuntalar el trabajo en el territorio de aquellos que mantienen contacto directo con el electorado. Aquí es donde la narrativa que promueve Cristina Kirchner encuentra otro sentido porque, apuestan en el oficialismo, servirá para sortear la resistencia de aquellos enojados por la indómita marcha de la inflación y las insuficientes acciones del gobierno nacional para reconstruir el poder adquisitivo.

“Cuando Cristina dijo que se bajaba generó mucho desánimo, sobre todo entre sus seguidores más fieles que son los que salen a militar y a explicar la inflación”, explicó un referente del kirchnerismo bonaerense.

Al mostrarse como la víctima de una “estrategia de proscripción” que promovió una “mafia organizada” desde el Poder Judicial, Cristina Kirchner cambió el panorama porque permite que perdure el deseo de los kirchneristas para tenerla en alguna boleta en 2023.

“Cristina sabe muy bien que, más allá de que sea o no sea candidata, ella tiene una responsabilidad muy grande en la conducción. No será candidata pero quedate tranquilo que va a estar haciendo todo. Lo dijo ella misma: ‘Voy a hacer todo lo que tenga que hacer para que vuelva a ganar un gobierno nacional y popular’”, agregó Secco.

En ese contexto, empezó a escucharse una especulación que indica que la Vicepresidenta podría rever su posición para sumarse como candidata a senadora nacional por la provincia de Buenos Aires.

Justamente el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, es uno de los que insiste con el operativo clamor. “A vos Cristina te necesitamos para seguir avanzando con los derechos, derecho al futuro”, arengó el martes al hablar en el acto que luego cerró la Vicepresidenta.

En la coalición opositora Juntos por el Cambio (JpC) salieron al cruce de la versión que la ex presidenta expone sobre su situación ante la Justicia y fundamentalmente sobre la condena que recibió del Tribunal Oral Federal 2 a 6 años de prisión e inhabilitación de por vida para ejercer cargos públicos.

“¿Proscripción, Cristina Kirchner? Ni proscripción, ni persecución política: JUSTICIA”, diferenció el senador nacional por la Unión Cívica Radical (UCR), Martín Lousteau. En línea se pronunciaron varios de sus socios políticos, como los diputados nacionales María Eugenia Vidal (PRO) y Ricardo López Murphy (Republicanos Unidos), entre otros.