El caso de Giovana Guadalupe Sosa, la joven de 20 años asesinada de un tiro en la boca en un hotel alojamiento de Tigre, generó gran conmoción. Sus familiares advierten que ella había denunciado a su novio, Tiziano Fiz, por violencia en redes sociales.
“Ella avisó en sus historias cómo era él. ¿Tuvieron que esperar a que la mate para salir a hacer las cosas de la manera correcta?”, expresó su prima, Juana Sosa, quien publicó la captura de la historia con la que Giovana había “escrachado” a Fiz días antes del crimen.
En esa publicación, la joven relató el calvario que vivía: “Maltrato psicológico, verbal y físico. Todos los días amenazándome con la familia. Desde que nos separamos me manda videos cogiendo con pibas. Estás re mal chabón. Me cansaste”. También agregó: “Tranqui que con la merca se regala cualquiera”.
Sin embargo, la Justicia confirmó que no había denuncias previas por violencia de género contra Fiz en el Departamento Judicial de San Isidro. Aun así, quienes la conocían sostienen que se trató de un femicidio que pudo haberse evitado.
“¿Cómo puede ser que el país siga de la misma forma en la que estamos? ¿A cuántas mujeres más van a seguir matando? ¿Cuántas señales más hay que dar antes de que nos maten? ¿Por qué la Policía, ni nadie, hace nada?”, se preguntó Juana Sosa en otra publicación de Instagram.
Así fue el femicidio de Giovana en Tigre
Giovana Guadalupe Sosa tenía 20 años. La madrugada del martes, acudió con su novio a un hotel alojamiento en El Talar, partido de Tigre. Los empleados del lugar escucharon una discusión, luego una detonación y, al ingresar a la habitación, encontraron a la joven muerta. Para ese momento, el sospechoso ya había escapado.
El crimen ocurrió en el Hotel Moeris, ubicado en Reconquista 2633. Las cámaras de seguridad registraron la llegada de la pareja y la posterior huida de Fiz.
Según testigos, Giovana tomó un remís desde su casa en Los Polvorines hasta Tigre, donde se encontró con Fiz. Juntos recorrieron la zona, pasaron por tres hoteles hasta que finalmente ingresaron al Moeris a las 2:40.
Los empleados del hotel declararon que hasta las 5:30 escucharon ruidos, golpes y una fuerte discusión, pero no intervinieron. Poco después, se oyó una detonación. Al entrar a la habitación, encontraron a Giovana desnuda sobre la cama, con un disparo en la boca. El lugar estaba lleno de sangre y restos de pólvora.
Las cámaras de seguridad captaron a Fiz escapando encapuchado y con una mochila. Huyó ocho cuadras hasta refugiarse en su casa, donde más tarde fue detenido por la Policía. En el allanamiento, se le secuestró una pistola 9 milímetros, cuyo calibre coincidía con la bala que mató a la joven.
