Empleados de la cooperativa de Oberá en alerta y movilización

Pertenecen al sector de agua y saneamiento y piden la remoción del jefe de Redes y Mantenimiento.

Los empleados están trabajando con un quite de colaboración.
Los empleados están trabajando con un quite de colaboración.

Trabajadores del sector de Agua y Saneamiento del Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (CELO) se encuentran en estado de alerta y movilización y realizando un quite de colaboración para reclamar al Consejo de Administración que reemplace al actual jefe del sector Redes y Mantenimiento de Agua Potable, Juan De Olivera, a quien acusan de maltrato, discriminación y violencia verbal contra los trabajadores. Por la medida, los trabajadores realizan sus tareas solo en el horario habitual, no hay horas extras ni domingos o feriados. Solo se mantiene una guardia mínima.

Desde el sindicato, señalaron que el problema es antiguo ya que el Convenio Colectivo de Trabajo 57/75, de Obras Sanitarias, establece que los trabajadores del sector deben estar en el mismo encuadre sindical. El Sindicato del Personal de Obras Sanitarias de Misiones (SPOSM) presentó una nota ante el ministerio de Trabajo de Misiones para reclamar por la situación. Los trabajadores recordaron que, en 2014, en una resolución del ministerio de Trabajo de la Nación, se estableció que todos los trabajadores de agua y saneamiento del país, tanto de empresas públicas como privadas o cooperativas, deben estar en el mismo Convenio Colectivo de Trabajo.

Según fuentes del sindicato, "los compañeros comenzaron a quejarse de que hay violencia verbal y acoso por parte del gerente. Para que se entienda, en el artículo 41 de nuestro Convenio Colectivo de Trabajo establece que un derecho de los trabajadores tener una licencia para situaciones particulares, que no es necesario que se justifique. Y este señor, cuando el pasan un escrito, agarra y dice que no sirve, rompe la nota delante de los compañeros. Ese es un ejemplo del destrato", señalaron a Misiones Online.

Agregaron que luego de la presentación ante el ministerio provincial, los trabajadores comenzaron a recibir aprietes y señalaron que el sindicato no permitirá este tipo de acciones contra sus afiliados. "Se decidió tomar una media de fuerza. Estamos en alerta y movilización y hacemos un quite de colaboración. Como hay reclamos de los socios, ahora empezaron a amenazar que van a echarnos. Hay siete compañeros, que después de la pandemia, van a echar", advirtieron.