Confirmaron que el ADN del brazo encontrado en Godoy Cruz coincide con el de Lucas Ampuero

El cotejo de ADN confirmó lo que los policías ya sospechaban desde el inicio: el brazo encontrado en un descampado al Oeste de Godoy Cruz pertenecería efectivamente al jóven desaparecido de 25 años, Lucas Nahuel Ampuero. Ahora, Franco Nahuel Ábrego, conocido como Cara Cortada, el principal sospechoso de la causa, fue imputado y enviado a la cárcel.

Se entregó “Cara Cortada”, el principal sospechoso por el asesinato de Lucas Nahuel Ampuero en Godoy Cruz

Todos los dedos apuntan a Ábrego porque fue la última persona que lo vio con vida. Vecinos afirman que vieron a Ampuero y Cara Cortada juntos el día que desapareció en un domicilio de la calle La Quebrada de Godoy Cruz. Allí fue donde los mismos vieron una gran nube de humo pocos minutos después.

Entre los restos que encontraron, los efectivos notaron que el brazo tenía un tatuaje del manga Dragon Ball, el mismo que tenía el joven de 25 años. De allí la hipótesis primaria de que la extremidad pertenecía a Ampuero y que el homicida, hasta el momento el sospechoso Cara Cortada, lo habría matado de un tiro, descuartizado y quemado.

Quién es Cara Cortada y su largo historial delictivo

Franco Nahuel Ábrego fue uno de los sicarios, o mejor conocidos como “angelitos” de “La Jaqui” Vargas, la líder narco del Oeste de Godoy Cruz que hoy en día se encuentra presa por tráfico de drogas y lavado de dinero.

En los enfrentamientos entre bandas narco del Gran Mendoza, Ábrego se cobró la vida de 3 personas. En junio del 2016, lideró un levantamiento en el ex Cose (Centro de Detención de Menores) donde se le adjudicó una tentativa de homicidio a uno de los operadores del lugar. Por ese hecho fue condenado en 3 años y 10 meses de cárcel que cumplió, ya siendo mayor, en el penal de Almafuerte, desde donde fue liberado en abril de 2020.

Su apodo Cara Cortada viene de sus 15 minutos de fama cuando en 2012, con 17 años, recibió un corte en la cara que le dejaría una cicatriz, luego de una cirugía plástica, que lo identificaría de por vida.

“Es un tipo frío. De hablar pausado. Es muy respetado en el ambiente delictivo. Todos le tienen miedo y nadie se mete con él. Se dice que ni el Camel –el jefe de la barra de la Lepra, Omar Jofré, asesinado a la salida de un boliche en 2019- se metía con él. También se dice que es un gran tirador. Últimamente, se decía que era empleado municipal”, explicó una fuente a Diario Los Andes.

Cómo habría llevado a cabo Cara Cortada el homicidio de Lucas Ampuero

La reconstrucción que hicieron los policías sobre los pasos de Ampuero indican que el joven salió de casa de sus padres en la calle Salvador Civit de Godoy Cruz el domingo 26 de febrero. Se dirigía a encontrarse con su novia embarazada de 5 meses y su hija pequeña.

Se fue en una moto Brava 110 cc blanca poco antes de las 19 horas. Una hora después, detallan los testigos que se encontró con Cara Cortada en un domicilio de calle La Quebrada de Godoy Cruz. Además de él, estaba su madre Nora Beatríz Díaz, que también está acusada por ser supuesta colaboradora en el homicidio y actualmente se encuentra con pedido de captura.

Lo que los pesquisas suponen es que Ábrego habría matado al joven de un balazo y su madre lo ayudó a quemar el cuerpo. Los vecinos confirman que salía humo de la propiedad a la misma hora y día en que se produjo el asesinato. Se cree que el sospechoso y su madre ocultaron el cadáver en un tacho de 200 litros y luego lo prendieron fuego para intentar borrar cualquier tipo de prueba.

Aunque los motivos del asesinato no son claros aún, existe la hipótesis de que pueda estar relacionado con la venta de drogas en esa zona de Godoy Cruz. Tal vez se trató de cuentas pendientes entre los dos, ya que se sospecha que Ampuero podría haber trabajado para Cara Cortada.

El martes 28 de febrero, cuando ya Ampuero llevaba dos días desaparecido, la familia decidió radicar la denuncia en una comisaría. La fiscal Lazo comenzó a investigar y personal policial de Homicidios realizó un rastrillaje en donde halló el pasado viernes 3 de marzo un brazo quemado a 500 metros de la casa de la madre de Cara Cortada, en una zona de difícil acceso ubicada cerca del ex autódromo Los Barrancos.

Al recoger los restos, los oficiales notaron que el brazo, que no había logrado ser quemado por completo, tenía un tatuaje del manga Dragon Ball, el mismo que tenía Ampuero. Allí se dieron cuenta de que se encontraban frente a sus restos.

Sin embargo, para poder confirmarlo debían hacer el cotejo de ADN. Un hermano de Ampuero se puso a disposición y este lunes 6 de marzo realizaron la comparación genética que fue 100% compatible. Este martes la fiscalía recibió el informe de los resultados y el caso avanzó con imputación a Franco Nahuel Ábrego.

Mientras tanto, Cara Cortada se entregó a la policía ese mismo día que comenzaron las pruebas de ADN. Dijo que estaba en Rivadavia y cuando la policía llegó confirmó que era cierto. El sospechoso expresó que dejó que lo detuvieran para demostrar que él es inocente.

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Asimismo, los detectives trabajan para poder dar con el paradero de la madre de Ábrego, quien tiene un pedido de captura bajo su cabeza y es sospechosa de haber participado en el asesinato.