En medio de las noticias que hablan de que Silvina Luna está en terapia intensiva, los focos apuntaron contra Aníbal Lotocki, el médico conocido popularmente como el “cirujano de las famosos”. A pesar de tener varias denuncias de mala praxis en su haber, continúa ejerciendo la profesión.
Gabriela Trenchi, Silvina Luna, Pamela Sola, Stefi Xipolitakis, son solo algunas de las celebridades que denunciaron al especialista cuyo nombre vuelve a adquirir notoriedad tras conocerse que la modelo, una de sus víctimas, se encuentra internada en grave estado.
Al cirujano, entre otras cosas, se lo denuncia por realizarle procedimientos no requeridos a sus pacientes y por inyectarles sustancias nocivas no autorizadas en sus cuerpos que, en algunos casos, generaron severas consecuencias.
En 2022, el juez Carlos Rengel Mirat -integrante del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº28- condenó al médico Lotocki a cuatro años de prisión al considerarlo responsable de las lesiones graves que sufrieron cuatro pacientes suyas luego de haberles realizado distintos procedimientos quirúrgicos.
En su alegato, el fiscal Sandro Abraldes había solicitado siete años y nueve meses de prisión, pero actualmente su clínica está activa, y él circula libremente porque aún la sentencia no quedó firme.
Las denuncias
De acuerdo a la acusación, Lotocki le causó lesiones en el cuerpo y en la salud a Pamela Sosa debido a la intervención médica que le practicó en noviembre de 2008 dentro de la clínica “Full Esthetic”. Allí, le colocó un producto de relleno no identificado que contenía microesferas de polimetil metacrilato (PMMA) en lugares del cuerpo en que está prohibido su uso y en cantidades superiores a las sugeridas por los médicos. Eso le provocó cuatro tumoraciones en glúteos y muslos, con un proceso inflamatorio crónico.
Una situación similar atravesó Silvina Luna, que fue intervenida en octubre y noviembre de 2011 en la misma clínica y donde también se le colocó microesferas de polimetil metacrilato (PMMA). Eso le provocó alteraciones anatómicas en los glúteos y en los muslos, lo que fue advertido y documentado por otro médico en junio de 2013.
Las lesiones sufridas por Stefanía Xipolotakis se dieron luego de la intervención médica de marzo de 2014 en donde también se le colocó polimetil metacrilato (PMMA).
Con respecto a Gabriela Trenchi, Lotocki había acordado con ella que le colocaría “hilos tensores” en los glúteos y que le extraería grasa de la pelvis, de la rodilla y de la cadera para mezclar con plasma de su sangre e inyectarle eso en la zona de los glúteos. La mujer le pagó 30 mil pesos y fue operada en agosto de 2015. Sin embargo, y pese al pedido de la víctima, Lotocki le colocó un producto de relleno que contenía microesferas de polimetil metacrilato (PMMA). Esto le provocó lesiones en el cuerpo y en la salud: una “normoanatomía del tejido celular y de los glúteos mayores y en los grupos musculares de muslos y de las piernas, caracterizadas por granulomas o farmacomas, como así también por un componente inflamatorio”.
“Aníbal Lotocki es un médico que ha sido violento con sus pacientes: en el marco de la confianza que estableció con las cuatro víctimas, las usó para sus propósitos personales y les estropeó la salud”, dijo durante su alegato el fiscal Abraldes.
Al momento de analizar y solicitar la pena, el fiscal Abraldes había evaluado distintos puntos: el abuso y traición de la confianza; haber ventilado cuestiones personales que hacían a la intimidad de las víctimas; el daño que le causó a las pacientes. Tomó en cuenta que las consecuencias que generó son “irreversibles y progresivas” y que impactan en la vida de todas las denunciantes, que no pudieron continuar con sus trabajos y que incluso tuvieron que consumir sus ahorros en tratamientos médicos.
“No atendía las más mínimas reglas de la práctica profesional: atendía en lugares sin habilitación, con productos que no podía usar e incluso quiso hacer responsable a sus pacientes por las consecuencias nocivas de su propio accionar delictivo”, se explayó.
Aníbal Lotocki, procesado por “homicidio simple por dolo eventual”
El 7 de junio de 2023, el juez Luis Schelgel procesó por “homicidio simple por dolo eventual” al cirujano Aníbal Lotocki. Fue por la muerte del paciente Rodolfo Cristian Zárate, quien acudió al médico en 2021 para realizarse una cirugía de remoción de tejidos en distintas partes del cuerpo tales como cuello, hombros, pectorales, brazos, axilas, cara anterior del abdomen, pelvis, región lumbar y sacar y glúteos.
Lo procesaron sin prisión preventiva. “Así lo resolvió el juez Luis Schelgel, que además dictó un embargo sobre sus bienes hasta cubrir los 4.804.700 de pesos. Además, el magistrado citó a indagatoria a los integrantes del equipo médico que operó y asistió a Rodolfo Cristián Zárate, quien falleció el 16 de abril de 2021 tras una lipoescultura y dermolipoctomía”, detalló el portal Fiscales.gob.ar.