El cannabis medicinal para humanos es legal y de uso común en varios países del mundo. Sin embargo, su adopción en veterinaria ha quedado rezagada en comparación con la medicina humana.
Cada vez son más los estudios científicos que aseguran que existe un potencial en el cannabis para tratar las convulsiones, el dolor, la ansiedad y el miedo, sobre todo en perros, pero también en gatos e incluso, ya se hicieron pruebas sobre otros animales.
El caso más famoso es el de Nidia, una elefanta asiática de 55 años que se encontraba en cautiverio. Ella tenía problemas crónicos en las patas, se habían formado fisuras en las almohadillas de sus plantas, las uñas de sus pies se habían agrietado y comenzó a tener abscesos. El animal adelgazaba y había perdido el apetito.
Su veterinaria a cargo estaba desesperada, y decidió probar con el cannabidiol, o CBD, el compuesto terapéutico no tóxico del cannabis. El primer síntoma de que el tratamiento era eficaz fue cuando Nidia empezó a tener antojos. A los pocos días de empezar a tomar CBD, pasó de comerse solo un tercio de la comida a ingerirla prácticamente toda e incluso a veces repetía. En cinco semanas, había ganado poco más de 250 kilogramos.
Uso de cannabis medicinal en animales
En uno de sus artículos, José Massabó integrante de Veterinarios Cannábicos Argentinos, afirma que hay evidencia histórica del uso medicinal del cannabis en animales no humanos (Animales de trabajo y de compañía) desde el siglo XII en la India.
“Los estudios e incorporación de la terapia con cannabis en animales de distintas especies, con grandes resultados y muy alentadores, ya son en sí mismos, evidencia de que estamos delante de una herramienta terapéutica de increíbles dimensiones”, agrega.
Sin embargo, estos especialistas alertan que el uso debe ser si o si medicinal, no recreativo. Antes de arrancar cualquier proceso, se necesita un diagnóstico realizado por un médico veterinario, ya que, dependiendo de que patología posea el animal, se realizarán formulaciones diferentes.
Enfermedades que alivia el cannabis
- Dolor Crónico (Artrosis, Hernia de disco, etc)
- Epilepsia Idiopática
- Disfunción Cognitiva Senil (Demencia Senil)
- Trastornos de Comportamiento (Ansiedad, Hiperapego)
- Secuelas de Moquillo Canino
- Dermatitis Atopica (y otras afecciones de la piel)
- Cancer (Cuidados Paliativos)
- Asma Felino
- Diabetes Mellitus
*Con información de la Asociación de Veterinarios Cannábicos
