Eugenia “China” Suárez sigue en el ojo de la tormenta luego de pasar este fin de semana junto a Franco Colapinto en Madrid y ser el centro de atención de medios y redes sociales.
Este martes la actriz llegó a Buenos Aires, donde fue recibida por la prensa, pero prefirió no dar declaraciones sobre lo acontecido, que no solo tuvo repercusión en el ámbito del espectáculo local sino que también caló hondo en la propia escudería Williams, que le habría pedido al joven de 21 años que “bajara el perfil”.
Este miércoles, la cámara de Intrusos esperó a la ex de Benjamín Vicuña en las cercanías de su hogar y logró abordarla cuando salía del gimnasio. La actriz tuvo algunos intercambios con el cronista, pero finalmente se puso seria para pedirle que dejen de seguirla.
El enojo de la China Suárez
Mientras el cronista la seguía por la calle, la “China” hablaba por teléfono -o simulaba hacerlo- sin darle lugar a las preguntas.
“Buenas, ¿cómo va, todo bien?”, saludó cuando se cruzó con el periodista de frente. Y le comentó: “Estoy hablando por teléfono”.
El notero continuó caminando cerca de ella esperando que se desocupara, pero ella no solo no lo hizo, sino que se detuvo puntualmente para pedirle que desistiera de seguirla.
“¿Me van a seguir hasta mi casa? No voy a hablar, ya me conocen, no tengo nada para decir. Quiero llegar a mi casa tranquila y no quiero que graben para mi casa”, dijo de un tirón y visiblemente enojada.
Cuando el periodista le repitió la consulta sobre si tenía algo que decir luego de todo lo que se vio este fin de semana, Suárez repitió: “Nada tengo para decir. Te lo pido, no me sigan. Por favor, dale. Gracias”.
