“Cumpliendo con la normativa establecida en el Reglamento Conmebol y contando con el acompañamiento de las autoridades de seguridad de la Provincia de Córdoba, el público de Vélez Sarsfield podrá presenciar el partido de vuelta por los cuartos de final de Copa Conmebol Libertadores”.
El comunicado con el que Talleres confirmó de manera oficial que abre las puertas para la revancha con Vélez, el 10 de agosto y por la clasificación a semifinales. “Por disponibilidad operativa y por motivos de seguridad, la parcialidad de Vélez Sarsfield ocupará la Popular Sur Artime del Estadio Mario Kempes”, puntualizaron desde barrio Jardín.
Es decir que Talleres, sin lugar para sus hinchas en el choque de ida este miércoles a las 21.30 en Liniers, le otorgará a sus rivales al menos unas 8.000 entradas, como ocurrió en octavos ante Colón de Santa Fe, a 8.600 pesos cada boleto (la capacidad de la tribuna es para 11 mil personas).
La decisión generó fastidio en muchos hinchas de Talleres, que preferían contar con la totalidad del estadio, incluida la cabecera Artime, y que el público visitante fuera ubicado en el codo de algunas de las dos plateas, en ese caso la Ardiles (la Gasparini ya fue colmada en su capacidad por socios Albiazules) y no más de 2.500 lugares.
