El presidente de la Nación, Alberto Fernández, respondió este martes con dureza al fallo adverso de la Corte Suprema de Justicia de la Nación contra una decisión sanitaria que él plasmó en un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y afirmó que lo apena “la decrepitud del derecho convertido en sentencias”.
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“Es un tiempo muy difícil, porque la pandemia no nos da respiro. Y en el que yo voy a seguir cuidando la salud de los argentinos y las argentinas por más que escriban muchas hojas en sentencias”, aseguró Fernández.
El jefe de Estado dijo esto en el partido bonaerense de Ezeiza, donde puso en marcha el Plan Federal Juana Manso que, con una inversión de 20.000 millones de pesos, brindará 633 mil netbooks a estudiantes de escuelas secundarias de todo el país para darles acceso a la conectividad.
Tres horas antes se había conocido que la Corte Suprema de Justicia respaldó el planteo que elevó el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para continuar con las clases presenciales en la Ciudad a pesar del DNU que firmó Fernández hace tres semanas para cerrar las aulas ante la segunda ola de la pandemia de Covid-19.
Después de conocer el fallo, Fernández dijo: “Yo que soy un hombre que ama el Estado de Derecho y que lo reivindico, y que respeto las sentencias judiciales, también como hace más de treinta años que enseño Derecho en la Universidad de Buenos Aires, no saben lo que apena ver la decrepitud del derecho convertido en sentencias. Pero bueno, es el tiempo que me ha tocado. También deberemos luchar contra eso”.
También afirmó que hay que estar “más unidos que nunca” porque es un tiempo difícil porque hay un virus que el ojo humano no ve y ataca de modo impiadoso la salud, la vida y la economía de los pueblos. “Ese es el verdadero enemigo que tenemos. Nada de lo que hacemos, lo hacemos para complicarle la vida a nadie. Lo hacemos para preservar la salud y la vida de nuestra gente. Y contra eso dicten las sentencias que quieran. Vamos a hacer lo que debemos”, añadió.
Tras cuestionar a Juntos por el Cambio porque su gobierno entregó sólo 700.000 computadoras en cuatro años a los alumnos, Fernández expresó: “El acceso a internet para un niño o una niña es lo que en mi época era acceder a un libro. Y las sociedades ricas son las que se educan, que cultivan el conocimiento, los que desarrollan la ciencia y la tecnología. Esas son las sociedades ricas”.
Por otro lado, sostuvo: “El mérito existe, no cabe ninguna duda. Pero el mérito para que valga como tal, exige que todos partan desde el mismo punto. Sino suelen llegar a la meta los que están socialmente aventajados. Tratar de que todos partan desde el mismo punto tiene mucho que ver con la sociedad igualitaria de la que hablamos”.
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Al igual que la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, el Presidente destacó con énfasis el discurso de su par estadounidense Joseph Biden ante la Cámara de Representantes de su país, haciendo foco en la sindicalización y en la reactivación económica, con un fuerte impulso del Estado.
Incluso, lo bautizó como “Juan Domingo Biden”, por el parecido de su discurso con el modelo de política y económica que propuso Juan Domingo Perón el siglo pasado en la Argentina, para impulsar la economía local, apuntando a la producción nacional y la sustitución de importaciones.
Por la corresponsalía de Buenos Aires.
